La demencia supone un problema de salud pública que va aumentando progresivamente, afectando alrededor de 50 millones de personas en todo el mundo. Hay casi 10 millones de casos nuevos cada año y se prevé que esta cifra se triplique en 2050.
Cada vez son más los estudios que respaldan los beneficios de los programas de estimulación cognitiva como tratamiento eficaz de primera opción no farmacológico, tanto en envejecimiento normal como en personas con deterioro cognitivo leve, así como en demencia leve y moderada. Por ejemplo, en el caso de la enfermedad de Alzheimer (EA), aunque no se puede revertir el deterioro, gracias a la terapia de estimulación cognitiva se puede enlentecer de manera significativa, manteniendo así la funcionalidad de la persona el mayor tiempo posible y mejorando su calidad de vida.
La estimulación cognitiva permite fortalecer y mantener aquellas capacidades cognitivas que se encuentran preservadas, lo que se conoce como reserva cognitiva,
La pandemia por Covid-19 ha supuesto una prueba indiscutible de como la soledad, la falta de actividad y la restricción de relaciones sociales pueden acelerar el deterioro cognitivo. Sin embargo, gracias a los juegos cognitivos y aplicaciones digitales, algunas personas han podido mantenerse activas y estabilizadas desde sus casas.
Uno de los últimos avances tecnológicos en el campo de la estimulación cognitiva es el 'NeuronUP', una plataforma web de neurorehabilitación con múltiples ejercicios así como herramientas y simuladores de la vida real para entrenar las funciones cognitivas, habilidades sociales y actividades de la vida diaria. La aplicación cuenta con actividades adaptadas y personalizadas a los diversos grados de afectación del usuario: la edad, ejecución individual o grupal, nivel socio cultural y educativo... Las tareas pueden llevarse a cabo en dos formatos ya sea en lápiz y papel o digitalmente, mediante ordenador o tableta, lo que suele resultar muy beneficioso y motivador para el paciente.
De esta manera, se puede programar una sesión a distancia desde el hogar siempre bajo la supervisión del neuropsicólogo, el cual planificará una intervención personalizada, adaptándose a las circunstancias y necesidades del paciente.
Sin embargo, no hay que olvidar los beneficios que supone realizar terapia de estimulación en grupo, ya que favorece el establecimiento de rutinas y evita la desconexión del medio. Además, promueve la socialización, mejorando la fluidez verbal y el sentido de pertenencia de grupo, lo que repercute positivamente en la autoestima y autonomía personal del paciente.
Si se tienen más de 60 años y no se sufren problemas de memoria es aconsesable practicar juegos cognitivos con la tableta, ordenador, teléfono móvil para potenciar la reserva cognitiva. Actualmente existe mucha oferta. A modo de ejemplo podemos citar www.neuralex.es/juegoscognitivos o www.cerebroagil.com
Si se tienen problemas de memoria es conveniente consultar al médico y plantearse hacer cursos de internet como www.neuralex.es y www.aliadosenalzheimer.es. El esfuerzo siempre será más efectivo si es un neuropsicólogo el que aconseja de forma personalizada.
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