Un agente de la Guardia Civil, de espalda. | Guardia Civil

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Agentes del equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Osuna (Sevilla) han detenido a un menor de 16 años por un supuesto delito de tentativa de homicidio, lesiones graves y amenazas de muerte.

La investigación comenzó el mismo día en el que tuvieron lugar los hechos, en la madrugada del pasado 6 de noviembre, cuando en un «entorno lúdico» y próximo a la «finalización de una fiesta organizada en una conocida discoteca de la localidad por la Universidad», según informa en una nota de prensa.

El menor ahora detenido arremetió, presuntamente, con un arma blanca a un estudiante en reiteradas ocasiones, «persiguiéndole por los exteriores de la discoteca, golpeándole e intentando agredirle con una navaja, causándole diversas lesiones y gritando de forma constante su intención de matarle, hasta que finalmente consiguió arrinconarle».

Ante la gravedad de los acontecimientos, otro joven estudiante intervino y se interpuso entre el agresor y su víctima, «con los brazos extendidos con las palmas hacia fuera intentando transmitir al atacante sensaciones de tranquilidad, tratando de evitar de este modo cualquier acción irreversible».

Aun así, el menor lanzó una cuchillada hacia su cuello, que al intentar protegerse «recogiendo la cabeza» impactó en su rostro, produciéndole «graves lesiones al atravesar completamente su mejilla», heridas que precisaron intervención quirúrgica para la reconstrucción de su cara y más de veinte puntos de sutura desde la zona superior de la oreja hasta la parte inferior de la mandíbula, «a escasos milímetros de su vena yugular».

El agresor huyó del lugar y no pudo ser interceptado por los numerosos estudiantes que se encontraban allí. La Guardia Civil critica, a su vez, la actitud mostrada por los responsables de seguridad de la discoteca que, «en reiteradas ocasiones, negaron auxilio al primer estudiante agredido, a pesar de ser testigos directos de cómo el menor intentaba acabar con su vida del estudiante, sufriendo también un corte en la mano uno de los porteros, pero llegando incluso a sacarlo de la discoteca y cerrarle las puertas para que no tuviera refugio». Por estos hechos, se ha procedido a la imputación de un delito de omisión del deber de socorro al citado personal de seguridad.

La Guardia Civil destaca, además, la «dificultad» que ha tenido la investigación de estos hechos, puesto que «al tratarse de una fiesta universitaria, donde la mayoría de los estudiantes son de edades similares y con residencia habitual fuera de la localidad, hacían muy difícil la identificación del agresor»

El menor ha sido puesto a disposición de la Fiscalía de Menores de Sevilla, junto con las diligencias, pruebas y evidencias que conducen a la misma. El juez de menores de guardia el ha decretado el inmediato ingreso del menor en un centro de internamiento de régimen cerrado.