El Servicio de Parques, Jardines e Infraestructuras Verdes del Ayuntamiento de Zaragoza ha puesto en marcha una innovadora Estrategia de Sanidad Vegetal que ha conseguido disminuir drásticamente la presencia de procesionaria en los parques y zonas verdes de la ciudad.
En el ciclo 2021-2022 se retiraron de los árboles de la ciudad más de 9.000 bolsones, mientras que este año el número ha caído a una quinta parte y se han retirado alrededor de 1.800.
La procesionaria ('Thaumetopoea pityocampa') es una «visitante» habitual en parques y jardines de toda España en esta época del año y Zaragoza no es una excepción. Durante la última fase del ciclo biológico de este lepidóptero, cuando consigue bajar de los pinos, puede provocar reacciones alérgicas en humanos y, sobre todo, entre las mascotas, debido a sus pelos urticantes.
Sólo en su ámbito urbano Zaragoza tiene más de 15.000 pinos, especie en la que se desarrolla la procesionaria, de los cuales 7.000 están en el viario, han precisado desde el Ayuntamiento de la capital aragonesa.
La estrategia desarrollada en Zaragoza, que ha contado con la colaboración de especialistas en Gestión Integrada de Plagas, se enmarca además en los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), concretamente en relación con el número 3, 'Ciudad y Salud'. Esto significa que se han utilizado productos no dañinos para el medio ambiente ni para el resto de especies.
Estados de la orugas
Las orugas pasan por cinco estados biológicos distintos que se pueden describir mediante las siguientes fases: Adultos que emergen del suelo como mariposas de color gris ceniza; las hembras ponen huevos juntando varias acículas de los pinos; las orugas eclosionan y comienzan a desarrollar los pelos urticantes; forman nidos (bolsones) de seda donde se protegen de las condiciones climáticas adversas durante el invierno; y las orugas comienzan a descender por el tronco hacia el suelo, en busca de un lugar donde enterrarse, completando de esta manera su ciclo biológico.
La Estrategia de Sanidad Vegetal utilizada en el último año ha sumado varias acciones complementarias, como la instalación de 60 cajas nido de paseriformes, en colaboración con SEO-BirdLife, con el objetivo de impulsar su población en las zonas con mayor incidencia de procesionaria. Además, se han colocado más de cien trampas para la captura de adultos (mariposas).
Asimismo, en algunas zonas especialmente sensibles, como patios escolares, parques con alta presencia de zonas infantiles o densidad de mascotas, se ha hecho un tratamiento de endoterapia, consistente en inyectar en el tronco de los pinos un producto fitosanitario adecuado y autorizado. Por este medio se han tratado 532 ejemplares.
Se han instalado 60 trampas, con el objetivo de evitar que la procesionaria presente en el árbol pueda alcanzar el suelo. Es en estos meses de fin de invierno y primavera cuando las orugas comienzan a descender por los troncos para enterrarse en la tierra y allí convertirse en crisálida, emergiendo como mariposa adulta cuando llegue el verano.
Por otra parte, el Ayuntamiento de Zaragoza ha colocado 36 carteles informativos en las zonas más susceptibles de sufrir su presencia.
Recomendaciones
A modo de prevención, el Consistorio ha emitido una serie de consejos, como evitar en todo momento el contacto con las orugas, especialmente en los meses de febrero hasta abril; evitar transitar por zonas de pinares donde se hayan colocado carteles de aviso; mantener a los animales domésticos controlados en todo momento para evitar el contacto con las orugas.
Igualmente, respetar los elementos que se han colocado para el control de la plaga: cajas nido, trampas. En caso de que un animal doméstico haya tenido contacto con las oruga se debe acudir al veterinario antes de que se agraven los daños.
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