Teresa Rodríguez cree que muchos gobiernos pueden caer en manos de la derecha el 28M y apela "al voto útil andalucista"

En declaraciones a los medios antes de participar en un acto público con el candidato en Jerez por Adelante Andalucía, Carlos Fernández, la portavoz nacional ha lamentado que la recta final de la campaña haya sido «muy desagradable», fruto del «clima y la sensación» de que «la vieja política vuelve a hacer aparición el tema de la compra de votos».

En ese sentido, ha advertido que esas situaciones lo que hacen es «mancharlo todo y a todos un poco, incluso si no tenemos absolutamente nada que ver con esto», y genera en la ciudadanía la sensación de que «la política es el lugar sucio, donde se hacen cosas sucias por tal de perpetuarse en el poder, incluso a costa de comprar el voto de gente que está en situación de dificultad».

Para evitar eso, ha apostado por «desprofesionalizar la política» limitando los mandatos a dos legislaturas, una medida que ha ejemplificado con el alcalde de Cádiz, que abandona la política tras ocho años de mandato. También ha abogado por limitar los salarios «para que la gente que ejerza cargos de responsabilidad política tenga salario normales como la gente corriente y no se acerquen al ejercicio de la política oportunista que lo que pretende es enriquecerse y perpetuarse en el poder a toda costa».

«Si la política garantizáramos que fuera ese ejercicio altruista de servicio a la comunidad, no ocurrirían este tipo de cosas», ha aseverado.

Sobre estas elecciones, la portavoz ha advertido que las últimas encuestas «revelan» que la entrada o no de Adelante Andalucía en ayuntamientos como los de Sevilla, Jerez o Huelva «van a condicionar que los gobiernos puedan ser de izquierda o, al contrario, entren a formar parte del patrimonio de derecha y extrema derecha de esta comunidad autónoma».

Por eso, ante unas elecciones que son «esenciales» para Adelante Andalucía, Rodríguez ha hecho un llamamiento «al andalucismo de izquierda de la ética y del empoderamiento andaluz para garantizar ese futuro de la siguiente generación».

También ha apelado a la construcción de «un poder andaluz» que le diga «por fin a este país» que Andalucía «quiere su lugar en el mundo, su oportunidad para el siguiente periodo» y «un futuro para sus hijos».