Los sospechosos fueron sorprendidos 'in fraganti' cuando los agentes fueron comisionados por la Sala de 091 para que acudieran a un establecimiento de telefonía situado en el distrito de centro donde había saltado la alarma, aunque a su llegada se encontraba apagada, según ha informado la Policía en un comunicado.
Mientras los agentes realizaban las comprobaciones oportunas, observaron en las proximidades, junto a un vehículo de alta gama, a un hombre en actitud «sospechosa», quien, al ver a los policías, escondió rápidamente la llave del turismo en el paso de rueda.
Ante esta actitud, se dirigieron hacia él mientras el hombre mostraba un «gran nerviosismo», por lo que lo identificaron e inspeccionaron el vehículo, donde encontraron dos botellas presurizadas, una de oxígeno y otra de acetileno, ambas conectadas con un soplete, efectos frecuentemente empleados en los robos para la apertura de cajas fuertes mediante la técnica conocida como 'oxicorte'.
Igualmente, averiguaron que desde hacía unas horas se escuchaban golpes procedentes de los bajos comerciales del edificio donde se encontraba ubicada la tienda de telefonía, por lo que revisaron los locales adyacentes y encontraron la persiana de uno de ellos levemente subida, sorprendiendo en su interior a dos hombres agazapados.
Los agentes observaron cómo estos, valiéndose de inhibidores para evitar ser detectados, habían realizado butrón en la pared del local que comunicaba directamente con el almacén de la tienda de telefonía, donde hallaron dos cajas fuertes apalancadas que contenían en su interior teléfonos móviles de alta gama y elevado valor económico.
Asimismo, el Grupo de Robos de la Brigada Provincial de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía identificó a un cuarto sospechoso que se encontraba huido. Así, constataron que se habían desplazado desde otras localidades de España para cometer los delitos, alojándose en unos apartamentos turísticos.
Registro
Los investigadores llevaron a cabo un registro donde incautaron numerosos útiles empleados en la comisión de robos con fuerza, entre ellos un taladro percutor, una cizalla, una maza, un pico de obra, una escalera plegable, tenazas, destornilladores y guantes entre otros, así como dinero en efectivo.
Además, se han intervenido dos vehículos de alta gama, uno de ellos fue sustraído de un concesionario de automóviles en la provincia de Granada y le pusieron unas placas de matrícula falsas.
Por todo ello, los cuatro hombres, de entre 27 y 43 años, nacionalidad española y con antecedentes policiales, han sido detenidos como presuntos autores de un delito de robo con fuerza. Uno de ellos también ha sido arrestado por un delito de falsedad documental. Los detenidos han pasado a disposición judicial.
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