Archivo - Numerosas personas disfrutan de un día de playa en la Costa Brava (Girona). | Lorena Sopêna - Europa Press - Archivo

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La hostelería catalana ha registrado ocupaciones «altas» en esta temporada de verano, que se ha alargado durante septiembre y octubre por el buen tiempo.

Así lo han señalado representantes del sector en Catalunya consultados por Europa Press, que también han apuntado que agosto sigue siendo el mes con más ocupaciones en todas las provincias catalanas, seguido por julio.

Otra tendencia en la que han coincidido es en destacar el turismo sénior extranjero como el que más está alargando esta temporada, que «suele ser un cliente muy fiel, se anticipa y hace estancias largas», ha apuntado la presidenta de la Associació Turística Apartaments Costa Brava Pirineu de Girona (ATA), Esther Torrent.

Además, todos han celebrado unas buenas cifras durante el puente del Pilar --del 11 al 15 de octubre-- que ha dejado una ocupación de «prácticamente el 100%» en los hoteles de Lleida, según el presidente de la Federació d'Hostaleria de Lleida, Josep Castellarnau.

Turismo extranjero en lleida

La presidenta de la Associació de Càmpings de Lleida, Cel Feliu, ha celebrado la recuperación del turismo extranjero tras la pandemia del Covid-19, pero ha lamentado que se mantenga la tendencia de hacer las reservas a última hora.

Ha afirmado que la ocupación ha bajado respecto a los últimos tres años, pero que se mantiene por encima de 2019: «Tenemos que tener en cuenta que con la pandemia la ocupación creció más de un 20% en los campings de Lleida, y es muy difícil mantener esta cifra».

Respecto a las afectaciones por la sequía, ha asegurado que las cuencas de Lleida «no se han visto muy afectadas», por lo que los deportes de aventura y actividades acuáticas se han podido llevar a cabo con normalidad, según ella.

Por su parte, Castellarnau ha señalado que en junio los hoteles de los municipios del Pirineo donde se celebran fallas --fiesta típica que los municipios de la zona celebran en verano-- registraron una ocupación del 80% al 85%, unas cifras que subieron hasta el 95% en agosto en distintas zonas de la provincia.

Tarragona alarga por 'halloween'

El portavoz de la Federació Empresarial d'Hostaleria i Turisme de Tarragona (FEHT), Xavier Guardià, ha explicado que la temporada de verano en Tarragona «hace años» que se alarga de Semana Santa a 'Castanyada', a principios de noviembre, por la temporada de 'Halloween' en Portaventura.

Según él, esto «ha hecho de motor para que en la provincia cada vez más hoteles y campings celebren 'Halloween' y se convierta en un reclamo para el turismo».

Respecto a las pernoctaciones, ha dicho que tienen «más clientes pero duermen menos días» que en los años previos, y ha vinculado este hecho con la economía personal de cada persona.

Ocupación inferior a 2022 en girona

Tanto Esther Torrent como la gerente de la Federació d'Hostaleria de Girona, Mireia Figueras, han señalado que a principios de temporada había unas «expectativas muy altas» en Girona, que han terminado ralentizándose, pero aseguran que ha sido una buena temporada.

Según Torrent, la media de pernoctaciones en los apartamentos turísticos gerundenses se ha mantenido, mientras que Figueras ha señalado una media «más baja que en 2022» en los hoteles.

Figueras ha considerado que el turismo local en esta temporada «ha preferido viajar a destinos internacionales», una tendencia que han notado, y que entre los nacionales que han visitado la provincia ha habido muchas reservas de última hora.

Efectos de la tecnología

El gerente del Gremi d'Hostaleria de Sitges (Barcelona), Alejandro Eguía, ha apuntado que el desarrollo tecnológico en el sistema de reservas del sector hotelero ha llevado a que «un grosor importante de clientes opte por hacer reservas a última hora».

Xavier Guardià también ha coincidido en destacar esta tendencia: «Antes, por ejemplo durante la temporada baja, cuando más se acercaba un día concreto más bajaba el precio. Pero ahora, a través de las herramientas que ofrece Internet, el precio puede subir o bajar cada día según las reservas que se hagan, una cosa que algunos prefieren».