El pasado sábado 30, los agentes se movilizaron al saltar la alarma en una vivienda de una urbanización de Onda, informa el instituto armado.
Cuando llegaron al lugar, comprobaron que habían forzado una ventana para acceder al interior de la vivienda. Aunque en ese momento el perjudicado no echó en falta ningún objeto, los efectivos realizaron un reconocimiento de las inmediaciones y localizaron un vehículo estacionado en las inmediaciones que les resultó sospechoso.
Seguidamente se reforzó la vigilancia de la zona para prevenir más hechos delictivos similares. Horas más tarde, los agentes observaron que ese mismo vehículo había cambiado su estacionamiento dentro de la misma zona hasta un entorno más oculto por la vegetación, por lo que establecieron un dispositivo discreto de vigilancia para identificar al conductor.
El hombre fue detectado por los guardias civiles cuando se disponía a recoger el vehículo vigilado, momento en el que no pudo justificar de forma coherente su presencia en el lugar a altas horas de la madrugada
En el registro del vehículo se halló una pata de cabra compatible con la usada para cometer el robo, así como botellas de alcohol, pequeños electrodomésticos y enseres personales de los que el sospechoso no pudo acreditar su procedencia.
Los efectos intervenidos fueron mostrados al denunciante, quien los reconoció como de su propiedad y los recuperó. Al detenido se le atribuyen dos delitos de robo con fuerza. Las diligencias se han entregado en el Juzgado de Guardia de Nules (Castellón).
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