Joan Ridao ve "más urgente que nunca" legislar el papel de los lobbies en España

Lo ha dicho en una entrevista de Europa Press al publicar junto a la jurista Irene Araguàs 'Los lobbies. Presente y futuro de la regulación de los grupos de interés en España y en Europa' (editorial Marcial Pons).

Ridao, director del Institut d'Estudis de l'Autogovern (IEA) de la Generalitat y exletrado mayor del Parlament de Catalunya, ha dicho que «la regulación de los lobbies beneficia a todo el mundo» y posibilitaría al ciudadano estar informado y participar en los procesos de decisión.

Además, las administraciones y los lobbies tendrían un «marco seguro, claro y definido de la frontera entre lo que está permitido y lo que no»; de lo contrario, quien opera es el Código Penal y cualquier sospecha se traslada a la vía judicial.

Por eso, ha lamentado que la falta de legislación «es contraproducente», ya que hay una sombra de sospecha en cualquier relación entre los lobbies y las administraciones.

Por qué no está legislado

Sobre por qué no se ha legislado en España, ha respondido que ha habido varios intentos: se iniciaron en el proceso constituyente de 1978, pero en aquel momento no se alcanzó un acuerdo, y más tarde tampoco se ha hecho.

«Ha habido intentos no exitosos, pero la explicación es que los grandes partidos han tenido un interés relativo y las grandes empresas tienen otras maneras de influenciar en la actividad política y normativa», ha dicho.

Joan Ridao ha lamentado que al final de la última legislatura decayó un anteproyecto de ley sobre lobbies, y no le consta que se haya retomado con el actual Gobierno.

Además, ha recordado la «escasa tradición de regular este tema» y que la legislación en la Unión Europea (UE) es reciente, ya que hasta 2021 no fue obligatorio registrarse como lobby.

Lobbismo "bueno"

Ridao ha dicho que existe un lobbismo «bueno, entre comillas», que es el que ejercen empresas como las 'lobby firms' estadounidenses, dedicadas a asesorar sobre asuntos públicos.

También existe el 'inhouse lobbying', empresas que se interesan por las cuestiones que les afectan, pero que no influyen sobre la toma de decisiones.

Políticos y lobbies

Sobre las incompatibilidades de los políticos con los lobbies, considera que «es peor» un alto cargo que deja un puesto público y va a trabajar a un sector con el que ha tenido relación, que el que se va a trabajar a un grupo de presión.

Ridao ha planteado la cuestión de si es demasiado corto el plazo mínimo de dos años de incompatibilidad exigido a un cargo público que deja su puesto y se incorpora a una empresa relacionada con el sector que gestionaba.

Ha lamentado que, existiendo esta prohibición, «no hay un procedimiento, una oficina» que lo regule, y cree que se debería mejorar.

Catalunya fue la primera

Respecto a cómo valora la legislación que sí existe en Catalunya (fue la primera autonomía en regularlo), ha dicho que es «razonablemente positiva».

Para él, la ley «ha funcionado razonablemente bien, pero hay aspectos que se deberían mejorar»: por ejemplo, la definición de qué es lobby y qué no lo es, y dejar claro que un bufete de abogados que trabaja para un concesionario público hace lobbismo.

Además, se deberían prever y establecer «diferencias de trato y exigencia» según el nivel de ingresos del actor que hace de lobby: ha puesto como ejemplo que no es lo mismo un grupo de moteros que pida mejorar las protecciones viales que un grupo que reclame eliminar las Sicav.

También ha dicho que el registro de lobbies debería depender de un órgano independiente y no del Govern, y que «es necesaria una modificación de la regulación de las incompatibilidades».