Firma del convenio de patrimonio eclesiástico en Caldearenas. | GOBIERNO DE ARAGÓN

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El Gobierno de Aragón, la Diputación Provincial de Huesca y los Obispados de Jaca, Huesca y Barbastro-Monzón han anunciado este martes la inversión de 780.000 euros para mejorar las condiciones de 16 iglesias y ermitas de la provincia altoaragonesa.

El contenido del acuerdo se ha presentado este martes en la localidad de Caldearenas, cuya iglesia, en honor a San Antonio de Padua, es una de las elegidas para acometer estas obras de urgencia durante el año 2024, ha informado el Gobierno autonómico.

Las instituciones pondrán en marcha de este modo un convenio pionero que se aprobará próximamente y que va a permitir la financiación de las obras en los 16 templos elegidos. El objetivo, además, es que este acuerdo tenga continuidad en los próximos años.

La Consejera de Presidencia, Interior y Cultura del Gobierno de Aragón, Tomasa Hernández; el presidente de la DPH, Isaac Claver; y representantes de los tres Obispados han visitado en Caldearenas junto a su alcalde, Primitivo Grasa, las obras que se van a llevar a cabo en la Iglesia de San Antonio de Padua de esta población del Alto Gállego.

El conjunto de obras que se van a realizar las han elegido los propios obispados bajo un criterio de urgencia.

Tanto el Gobierno de Aragón como la DPH y los obispados emprenden este proyecto con un triple objetivo: poner de relieve el patrimonio artístico-histórico de nuestro territorio, tan rico como quizá desconocido en ocasiones; cuidar de los edificios históricos en los que es necesaria una inversión para su restauración, rehabilitación y mantenimiento; atender a nuestro patrimonio, lo que se traduce directamente en el cuidado de nuestros pueblos.

Colaboración institucional

En este sentido, la consejera ha subrayado que el convenio que se firmará con la DPH y los obispados de Barbastro-Monzón, Huesca y Jaca es un «perfecto ejemplo» de la colaboración institucional que el Ejecutivo autonómico está promoviendo en esta legislatura.

«Cuando sumamos esfuerzos, se multiplican los resultados y siempre redunda en un mayor beneficio para todos los aragoneses», ha manifestado.

Hernández ha recordado que Aragón es una comunidad que atesora un rico y diverso legado cultural. «No solo es importante tenerlo, sino que también es necesario que lo valoremos, que los aragoneses lo sintamos como propio para protegerlo y que esa herencia cultural llegue en el mejor estado a las futuras generaciones», ha añadido.

Por su parte, Claver ha destacado que, «además del valor patrimonial y religioso, debemos tener en cuenta que las obras que se van a ejecutar salvaguardan también el valor sentimental y el valor identitario que suponen estos edificios para muchos vecinos de nuestra provincia».

El presidente de la institución provincial ha afirmado también que una iglesia o ermita en un pueblo, «además de ser un elemento único y diferencial, es un lugar de convivencia, de encuentro o de romería donde todos hemos compartido momentos y recuerdos que forman parte de nuestra historia y que, por lo tanto, forman parte de nuestra identidad».

En este primer convenio anual, la DPH invierte 100.000 euros en cada obispado. Además, cada diócesis aporta la misma cantidad y el Gobierno de Aragón contribuye con 60.000 euros para cada obispado. El total son 780.000 euros de inversión el primer año.

Iglesias en las que se va a actuar

De este modo, se actuará en las iglesias de San Salvador de Torla-Ordesa --82.000 euros--, Nuestra Señora de la Asunción de Canfranc --79.000 euros--, San Antonio de Padua de Caldearenas --39.000 euros-- y San Martín de Fragen --60.000 euros--.

Asimismo, se elaborará el proyecto de la iglesia de Tramaced --22.652 euros-- y obras y actuaciones urgentes en los templos de Nueno --22.652 euros--, Torres de Barbués --45.305 euros--, Almudévar --50.230 euros--, Biscarrués --30.807 euros--, Morrano --20.000 euros--, Barluenga --18.122 euros-- y la Soledad de Bolea --50.230,30 euros--.

Por último, en el Obispado de Barbastro-Monzón, se intervendrá en las iglesias de San Orencio de Santorens --52.659 euros--, San Antonio de Padua de Merli --84.508 euros--, la torre de Baells --52.916,74 euros-- y la ermita de San Ramón del Monte de Barbastro --60.000 euros--.