El presidente de Aragón, Jorge Azcón, y la alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, en el homenaje a Miguel Ángel Blanco | MIGUEL G. GARCÍA

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El Ayuntamiento de Zaragoza ha recordado este miércoles a Miguel Ángel Blanco, el concejal de Ermua secuestrado y asesinado por la banda terrorista ETA hace 27 años.

Lo ha hecho con una ofrenda de flores y música de violonchelo en el monolito a las víctimas del terrorismo situado en la Plaza de San Francisco, en la que han participado la alcaldesa Natalia Chueca; el presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón; la concejala delegada de Víctimas del Terrorismo, Ruth Bravo y representantes de varios grupos municipales, así como la presidenta de las Cortes de Aragón, Marta Fernández, y otras autoridades civiles y militares.

Durante el acto se ha guardado un minuto de silencio y se ha leído el manifiesto elaborado por la Fundación Miguel Ángel Blanco y se ha recordado el sufrimiento terrorista que ha causado en nuestro país 1.451 víctimas mortales, cerca de 5.000 heridos, 167 secuestros terroristas, y decenas de miles de extorsionados.

La alcaldesa de Zaragoza ha afirmado que «han pasado 27 años de aquel asesinato y nuestro deber es que no se olvide. Que la democracia ganó a esos criminales enfermos de odio y de sinrazón y que fue el Estado de Derecho el que ganó esa batalla».

«Lo hacemos aquí, en este monumento a las víctimas del terrorismo que no se erige en esta plaza de San Francisco por casualidad. Está cerca de varios colegios y de la Ciudad Universitaria», ha señalado en relación a la «importancia de que nuestros jóvenes conozcan la historia real frente al blanqueamiento que se está realizando».

Natalia Chueca ha incidido en que «Miguel Ángel Blanco es, como el resto de víctimas del terrorismo, un símbolo de libertad y concordia y su memoria debe ser preservada frente a cualquier intento de distorsión histórica».

«Zaragoza estará siempre frente a los herederos de los terroristas y frente a las nuevas modalidades de terrorismo como es el yihadismo. Nuestra libertad es nuestra vida», ha concluido la alcaldesa.