La nueva consellera de Educación y Formación Profesional, Esther Niubó, y el presidente de la Generalitat de Catalunya, Salvador Illa, en una imagen de archivo. | Lorena Sopêna - Europa Press

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Sindicatos y entidades educativas de Catalunya piden a la nueva consellera de Educación y Formación Profesional de la Generalitat, Esther Niubó, que se destine el 6% del PIB catalán a la educación pública, reducir las ratios en las aulas, derogar el decreto de plantillas y mejoras laborales para los profesionales.

En declaraciones a Europa Press, la portavoz de Ustec·Stes, Iolanda Segura, le ha reclamado que tenga carácter negociador con la parte social y que apueste «exclusivamente» por la escuela pública; trabajar para acabar con la segregación, garantizar el profesorado necesario para reducir ratios y derogar el decreto de plantillas.

El secretario general de Aspepc-Sps, Xavier Massó, ve necesario recuperar un currículo educativo estructurado porque el actual, basado en competencias, «no está funcionando»; el retorno de los sexenios y derogar el decreto de plantillas; potenciar la especialización de los docentes de ESO y recuperar el concurso de traslados propio de la Generalitat.

Teresa Esperabé (CC.OO.) ha pedido que haya una «negociación real» con la comunidad educativa, reducir las ratios en 1º de ESO y aumentar las aulas de acogida; y ha instado al presidente, Salvador Illa, y a Niubó a «dar un vuelco a uno de los pilares más importantes del Estado del bienestar» y dedicar el 6% del PIB a educación.

"grave situación" de la educación

En un comunicado, CGT ha considerado que para salir de la «grave situación» de la educación en Catalunya se debe incrementar la inversión educativa al 6% del PIB; evitar los cierres de líneas en la pública y derogar el decreto de plantillas; reclasificar al Personal de Atención Educativa (PAE) y luchar contra la precariedad.

Intersindical, en línea con el resto de sindicatos, también ha reclamado aumentar la inversión en educación pública; derogar los decretos de plantillas y transparencia; reducir las ratios y la «calendarización para el retorno de la deuda acumulada de los estadios»; e impulsar el diálogo y compromiso con la parte social.

UGT también ha apostado por destinar el 6% del PIB en educación, ya que Catalunya está «muy por debajo de la media europea»; reducir ratios desde P-3 hasta la FP; destinar más recursos a la educación inclusiva y reducir la carga burocrática en los centros; y derogar el decreto de plantillas y garantizar la autonomía de los centros.

Asociaciones de familias

Las Associacions Federades de Famílies d'Alumnes de Catalunya (Affac) creen que se debe hacer una «apuesta firme» por aumentar las plazas públicas en todas las etapas educativas; replantear el cheque escolar; garantizar la gratuidad de los comedores escolares y proteger los derechos digitales de alumnos y profesores; entre otros.

Por la Federació de Famílies d'Alumnes d'Educació Secundària (Fapaes), su presidenta, Pati Sarrias, ha señalado que tienen buena relación con Niubó y que coinciden «con los objetivos que planteaba en la oposición»; espera avances para una escuela inclusiva y apuesta por un pacto social en pro de la educación en Catalunya.

La plataforma Adolescència Lliure de Mòbil ha solicitado a Niubó la prohibición de los 'smartphones' en la escuela y que «no se quede solo en una normativa, sino que se aplique a la realidad»; que se usen materiales educativo no digitales en el aula; que no se obligue a las familias a la compra de tablets u otros dispositivos para las clases; y sensibilizar sobre los efectos de las pantallas.