TW
0
TONI LIMONGI María Kodama, viuda de Jorge Luis Borges y presidenta de la fundación dedicada al escritor argentino, estuvo ayer en Palma con motivo de la presentación del curso que la Universitat de Palma de Mallorca ha organizado en torno al poeta y narrador. Kodama hizo la conferencia inaugural del curso con un análisis de la figura del «otro», un tema recurrente en la obra del intelectual. Este año se está celebrando el centenario del nacimiento de Borges y la escritora y traductora ha viajado por varios paÍses para difundir la obra de su difunto marido.

Según explicó María Kodama, su marido «consideraba a Llull como una de sus influencias, como una persona extraodinaria, un creador absoluto. Compartía con él la afición por la Cábala».

En una conversación que reproduce íntegramente hoy nuestra edición de papel, la viuda de Borges manifestó que «Mallorca era para él una palabra mágica, unida a la amistad, sobre todo con Jacobo Sureda, a quien no olvidó nunca. El movimiento ultraísta que organizaron en la isla fue la posibilidad de introducir un cambio en la literatura y el arte de la época. Más tarde cambió de ideas».