El poeta gaditano Rafael Alberti, último miembro de la Generación
del 27, murió poco después de las doce y media de la noche por una
parada cardiorrespiratoria en su casa del Puerto de Santa María,
localidad donde nació hace casi 97 años.
La muerte del poeta y pintor supone la desaparición del último
gran poeta de la generación considerada como el Siglo de Plata de
las letras españolas y la de una de las figuras que, con su vuelta
del exilio, simbolizó la reconciliación política en la transición
española, ya que Alberti fue comunista y puso sus versos al
servicio de la causa republicana. En el domicilio del poeta se
vivió esta madrugada un ambiente de tranquilidad y tristeza, con la
asistencia de familiares y amigos de la familia y, a las puertas,
numerosos periodistas.
Pasadas las tres y media de la madrugada, llegó al domicilio el
coche fúnebre, que, a las cuatro y media, trasladó los restos de
Alberti al cementerio de Chiclana de la Frontera, donde será
incinerado mañana. En enero de 1996, el poeta sufrió una
insuficiencia respiratoria que obligó a su ingreso hospitalario
durante ocho días y, en diciembre del mismo año, tuvo que ser
ingresado otra vez por el mismo motivo, aunque en esta ocasión
permaneció en el hospital durante más de dos semanas.
Desde entonces, apenas salió de su domicilio, donde fue
reiteradamente atendido por su médico personal Javier Pérez
Jiménez, Jefe de Medicina Interna del Hospital «Santa María de El
Puerto».
El pleno municipal de El Puerto de Santa María, en reunión de
urgencia, decretó tres días de luto en la localidad natal del poeta
y, posteriormente, los miembros de la Corporación colocaron una
corona de flores ante el busto del escritor ubicado frente al
edificio municipal, en la plaza del Polvorista.
Después se colocó una réplica de este busto en el salón de
plenos y un libro de firmas, en el que sus paisanos y todos
aquellas personas que lo deseen podrán mostrar sus condolencias por
la muerte de Alberti, que era «alcalde honorario» de esta localidad
de unos 85.000 habitantes.
La viuda de Alberti, María Asunción Mateo, acordó con los
portavoces municipales del Ayuntamiento portuense organizar un
homenaje popular en la localidad, ante las cenizas del poeta.
El homenaje se celebrará a las seis de la tarde de hoy en el
Monasterio de la Victoria, antiguo penal de El Puerto, y será
«sencillo, no tétrico», con lecturas de poemas a cargo de niños, y
alegre, según dijo el portavoz de IU-LV-CA, Ignacio García, en
representación de sus compañeros de la Corporación.
García señaló que la esposa del poeta, que está «tranquila y
apesadumbrada», ha comprendido que Alberti «es patrimonio de todos»
y por tanto se debería organizar un acto en el que los ciudadanos
pudieran despedirse de él.
Este acto se celebrará hoy por la tarde, después de que los
restos mortales se incineren en el cementerio de Chiclana de la
Frontera (Cádiz) y antes de que la familia del poeta esparza las
cenizas en la Bahía de Cádiz, como deseaba el poeta, en un acto
íntimo.
Poeta, pintor, dramaturgo, político, fue historiador de su
época, biógrafo de Lorca, Dalí, Buñuel, Aleixandre... y de sí mismo
en sus cinco autorretratos, que son las «Arboledas perdidas», cinco
volúmenes que escribió a lo largo de los últimos veinte años.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.