Una performance en Sa Nostra concentró a centenares de personas durante la fiesa. Foto: TERESA AYUGA

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El público se portó. Los amantes del arte, del paseo y del dejarse ver acudieron a la cita con el inicio de la temporada plástica en Ciutat. La Nit de l'Art volvió a ser un éxito, de lo que nos congratulamos, en una Palma que adolece de acontecimientos culturales que nos arranquen de los cuartos de estar. Una veintena de galerías y museos abrieron sus puertas hasta pasadas las 11.00 de la noche.

Las calles del casco antiguo de Ciutat vivieron ayer una agitación inusual. Y la calle Concepción, donde coinciden el Centre de Cultura Sa Nostra, la Mediterrànea y Joan Oliver «Maneu» fue la milla de oro de la zona en cuanto a animación. Allí, en el patio del Centre, la performance «Amagatalls» fue el reclamo perfecto para animar la noche y acompañar con danza y música a la pintura, escultura y fotografía de la que podemos disfrutar en nuestras galerías y museos. Una iniciativa que debe continuar porque los espectadores responden en masa. No conseguí llegar al interior, aunque lo intenté con más de un empujón. Desde la calle sólo conseguí ver al Dj Nacho Velasco, junto a la mesa de mezclas. Esperamos que los de Sa Nostra sigan en la brecha.

Via Verí y Pelaires, con las galerías de Pep Pinya y Joan Guaita, son otro punto masivo. Por supuesto, en el Casal Solleric, cita más oficial, también hubo el bullicio de esperar. Los nuevos cargos del PP, consellers, concejales de Cort y directores generales debutaron en masa. La alcaldesa, Catalina Cirer, y sus concejales Rodrigo de Santos, Francisca Bennàssar y Margalida Ferrando caminaron de lo lindo dando la vuelta entera. Tres horas de visita, saludos, abrazos. Con ellos, ya más puesto en el ambiente cultural local, guiando a la comitiva, el concejal del ramo, Rogelio Araújo. Y otro político que se estrena en este sector del arte, la música y los libros, el director insular de Cultura del CIM, Josep Lliteres, les acompañaba.