Los miembros del Patronato de la Fundació Tren de l'Art han
decidido que Pere A. Serra, hijo ilustre de Sóller, presida esta
institución. Quien también es presidente del Grup Serra explica en
la siguiente entrevista algunas características de la nueva entidad
cultural y cuál va a ser su aportación.
-¿Qué significa para usted, como «solleric», presidir la
Fundació Tren de l'Art?
-Es un gran honor, porque cuando era muy joven trabajé en esta gran
compañía que es el Ferrocarril de Sóller. Como solleric e hijo
ilustre de la ciudad suponía para mí un gran compromiso con mi
pueblo aceptar este cargo, sobre todo si se tiene en cuenta que
significaba recoger el reto que lanzó públicamente el president del
Govern, Jaume Matas, en la inauguración del espacio dedicado a
Pablo Picasso en la estación de Sóller: convertir esta ciudad en la
capital del arte del Mediterráneo.
-El Ferrocarril ya ha adquirido Can Prunera, que
gestionará la nueva fundación. ¿Cuál será la función del casal: una
casa-museo o un museo de arte?
-Esta adquisición ofrece la posibilidad de poder conservar y
disfrutar de una de las casas más hermosas de Mallorca, tal vez la
de estilo modernista más importante de la Isla. Puede ser un gran
atractivo para los visitantes y, por supuesto, también para los
sollerics. Ahora bien, esta función de casa-museo tiene que
complementarse puntualmente con otras manifestaciones culturales,
como exposiciones o conciertos.
-¿Cuál será la implicación de los ayuntamientos de
Sóller y Palma?
-Uno de los proyectos es que la estación de Palma sea también una
«puerta de entrada» al arte que los pasajeros hallarán en Sóller.
El Ajuntament de Palma se implicará en esta remodelación aunque los
contenidos serán diferentes de los de Sóller, donde están las
cerámicas de Picasso y los grabados de Miró. Seguramente se
centrará más en el paisajismo mallorquín. Con respecto al
Ajuntament de Sóller, la fundación tiene que contar a la fuerza con
su participación ya que el Tren es una empresa sollerica que está
en manos de sollerics.
-¿Cómo se financiará la fundación?
-Hay que recordar que los titulares que asistieron a la junta del
Ferrocarril, y que representan al 69 por ciento de las acciones,
votaron por unanimidad la creación de esta fundación. Por lo tanto,
el Ferrocarril cuenta con una parte de sus beneficios para llevar
adelante esta iniciativa. Evidentemente, tenemos que implicar a las
administraciones. En este sentido, quiero reiterar el compromiso
del president Jaume Matas, que fue muy claro y contundente cuando
lanzó la idea de la «capital del arte». Por lo que concierne a la
capacidad de la compañía, sólo hay que recordar que hace dos años
el tren estaba en «peligro de extinción inminente» y que se ha
conseguido no sólo salvarlo, sino dotarlo de un gran potencial.
-¿Cree que una ciudad como Sóller, que cuenta con pocos
recursos, podrá alcanzar el hito de ser la capital del arte que
propuso Jaume Matas?
-Estoy convencido de que el potencial de Sóller y del Port es
enorme. Estamos negociando recuperar como parque público parte de
los espacios verdes de la zona de los faros y Santa Caterina, que
podrían ser un escenario único para esculturas al aire libre en un
entorno privilegiado.
-¿Cree que el sector turístico y comercial debería
integrarse en este proyecto?
-Sería deseable ya que se beneficiará, especialmente, el sector
turístico. El conseller de Turisme se ha mostrado interesado y hace
suyos los propósitos del presidente. Esperamos que haya este
apoyo.
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