Guillem Ginard, Dolça Mulet, Juli Minoves, Maria Antónia Munar, Miquel Julià, Josep Lliteres y Jordi Gallardo, ayer en el museo D'Areny-Plandolit.

TW
0

NURIA ABAD (ANDORRA)
«Si algo nos diferencia y mucho, y además no podemos negar cierta envidia, es que Andorra es un país, un pequeño estado que tiene la soberanía que nosotros quisieramos». Estas palabras fueron pronunciadas ayer por la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Antònia Munar, durante la presentación de la segunda edición de los Premis Mallorca, que tuvo lugar en la Casa Museu d'Areny-Plandolit del municipio andorrano de Ordina.

Horas antes, Munar se había entrevistó con el jefe de Gobierno de Andorra, Albert Pintat, y el ministro d'Afers Exteriors, Cultura i Cooperació, Juli Minoves, con los que estableció «la base de futuros compromisos en defensa de la unidad cultural que nos une», según aceptó éste último. Munar firmó en el Libro de Oro de la sede del gobierno andorrano. De la colaboración establecida en la reunión, Munar destacó la intención de compartir conocimientos para paliar el déficit del uso de la lengua catalana entre los adolescentes, así como el desarrollo de intercambios culturales en forma de paquetes turísticos para la Tercera Edad y los jóvenes y proyectos artísticos de artes plásticas y música.

El Consell de Mallorca ha elegido Andorra para presentar los Premis Mallorca de creación literaria, así como hiciera con Perpinyà el año anterior, «territorios en los que se habla la lengua catalana, una lengua que el Consell quiere promocionar no sólo para que se conozca, sino también para que se utilice», afirmó el director insular de Política Lingüística, Miquel Julià, que presidió el acto junto a Munar, Minoves, y la vicepresidenta y consellera de Cultura del Consell, Dolça Mulet, que definió estos galardones como «una apuesta fuerte para enriquecer y fortalecer nuestro patrimonio cultural común».