Acercar la música clásica a los jóvenes, ayudar a los músicos a formarse una carrera y, sobre todo, apoyar y potenciar la música contemporánea son los objetivos principales con los que hace 50 años nació Joventuts Musicals de Palma. Principios y filosofía que, medio siglo después, se ha consolidado como su marca personal. A finales de 1956, y animados por el presidente de Joventuts Musicals de Barcelona, Narcís Bonet; el pianista Joan Moll fue el encargado de poner en marcha este proyecto, que durante los últimos treinta años ha presidido Concepció Oliver.
El 28 de agosto se celebrará una actuación para conmemorar el cumpleaños de la entidad en el que participarán artistas que ya han actuado en otras ocasiones en las Serenates como Boris Belkin o Tamás Vásáry. Tras 50 años, la formación se consolida como una de las principales promotoras de la música clásica en la Isla.
«Al principio, todo lo juvenil era sospechoso y hubo muchas personas que tuvieron que avalar nuestro proyecto», explicó el músico Joan Moll, que fue el presidente hasta 1958. Años después, volvió a ocupar la presidencia durante una década. Entre otros, el entonces director de la Orquestra Simfònica, Ekitay Ahn; el compositor Joan maria Thomàs o Jaume Mas Porcel, y otros como Miquel Forteza Pinya, el pintor Coll Bardolet o Francesc de Borja Moll apoyaron el nacimiento de la formación, que cuenta con coros infantiles y juveniles.
Los inicios fueron complicados para la entidad por la situación política del país. «Fuimos los introductores de la Nova Cançó, lo que nos trajo problemas con la censura», recuerda Moll, que en mayo fue nombrado presidente de honor de Joventuts Musicals. Además, en este acto, se nombraron socios de honor a los otros presidentes de Joventuts: Miguel Duran, Francisco Ramallo, Pau Valls, Gonzalo Company y José María Cortado. Este último fundó las Serenates d'Estiu de Sant Francesc. «Cuando trasladamos las Serenates al Castell de Bellver, todo el mundo pensó que era una locura. Sin embargo, se ha consolidado como uno de los mejores festivales de Mallorca», comentó la presidenta de Joventuts Musicals, Concepció Oliver.
La institución ha sido pionera de festivales y actuaciones que se han ido convirtiendo en citas musicales habituales. «Nuestra labor demostró qué era lo importante y ahora esos proyectos se desarrollan con o tras instituciones que poseen más solvencia y capacidad de maniobra que nosotros», comentó Oliver.
Actualmente, Joventuts Musicals dirige la parte artística de los Concerts del Corpus, además del ciclo de música de cámara, los conciertos del Pla de Participació y las Serenates d'Estiu, y posee cinco coros filiales de la coral de la UIB integrados por 200 niños entre 5 y 18 años. Además, realiza el carnaval de los animales o los conciertos escolares.
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