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JONAS CLIMENT
La Reial Acadèmia de Belles Arts de Sant Sebastià celebró ayer en su salón de actos la inauguración del curso académico 2007-2008. El acto contó con la presencia de la consellera d'Educació i Cultura, Bàrbara Galmés.

El acto fue presentado por el presidente y académico de la institución, Miquel Alenyà Fuster.
A continuación, el secretario general de la academia, Rafael Perelló Paradelo, se encargó de leer la memoria de las actividades más destacadas de los cursos 2005-2006 y 2006-2007. Con ella, se destacó la celebración de la misa por la festividad de su patrón de Sant Sebastià, el nombramiento del nuevo organigrama de la institución tras la etapa cerrada por el antiguo presidente Jaume Mir y Ramis, la necrológica dedicada al fallecido pintor y académico Josep Coll Bardolet y, por último, la renovación de los estatutos fundacionales de la propia institución.

La siguiente en intervenir fue la consellera d'Educació i Cultura, Bàrbara Galmés, quien aprovechó para hacer una mención especial al anterior presidente y expresar sus condolencias por la muerte del académico Josep Coll Bardolet, así como para expresar su confianza en los proyectos que llevaran a cabo los académicos electos para la nueva etapa de la academia. Finalmente, quiso recalcar que desde su conselleria «estamos convencidos de que invertir en cultura, es invertir en calidad de vida para los ciudadanos».

La última intervención corrió a cargo del el presidente y académico de la institución, Miquel Alenyà Fuster, quien se encargó de pronunciar la lección inaugural del curso académico 2007-2008, que versó sobre el centenario de los pintores mallorquines Ricard Anckermann (1942-1907) y Joan O'Neille (1928-1907). Ambos artistas, vinculados a la Acadèmia de Belles Arts, tuvieron una gran trascendencia en el mundo de la plástica de Balears.

El evento terminó con un concierto a cargo de la agrupación Bóreas Quintet que interpretó piezas de Danzi, Ibert, Arnold y Prohens.