El cineasta mallorquín Toni Bestard, nominado a los Goya con su obra 'El anónimo Caronte'.

TW
0

CELIA HEREDIA

La candidatura a los premios Goya al Mejor Cortometraje este año puede verse afectada tras la reunión que tuvo lugar la semana pasada en la Academia del Cine, en la que se comunicó a directores y productores que esta categoría no estaría incluida en la gala oficial.

La Academia de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España convocó el pasado 6 de noviembre a los cortometrajistas candidatos al Goya para comunicarles esta decisión y, entre ellos, se encontraba el director mallorquín Toni Bestard por su corto documental El anónimo Caronte.

La respuesta por parte de los afectados ha sido la creación de una plataforma Indignados.org, porque, en palabras de Bestard, «no se puede aceptar una decisión que resta mérito al cortometraje, una rama del cine español tan importante como las demás».

Posibles soluciones

Tras la recogida de aproximadamente cuatro mil firmas apoyando la negativa a esta decisión de la institución, los miembros de la junta directiva de la Academia se reunieron el jueves para solucionar el conflicto. Ayer la Academia de Cine se encontraba con los directores afectados con el objetivo de buscar posibles soluciones. En el encuentro no se alcanzó ningún acuerdo, pero sí que se ofertaron una serie de propuestas que no han trascendido y, en estos momentos, están pendientes de que sean aceptadas por directores y productores.

Esta situación, además, ha provocado que la Plataforma exponga otras quejas que «de no haber sido por esta situación, hubiera sido más difícil que salieran a la luz», señaló Bestard, quien añadió que «ahora lo que pretendemos es que se mejore la situación del cortometraje en España y que, a su vez, se mejoren las relaciones entre nuestra plataforma y la Academia».

El cineasta añadió que «nos indigna que se menosprecie la categoría de los cortos en la gala de los Goya, pero también nos indigna el sistema de selección de los cortometrajes para las candidaturas» porque «mientras que en otros festivales de reconocimiento internacional los cortos tienen un máximo de duración de 40 minutos, los cortometrajes candidatos al premio de la Academia española tienen que tener un máximo de 20».

La última palabra la tienen los cortometrajistas, que el lunes volverán a reunirse para poder llegar a un acuerdo definitivo.

Apoyo del IEB

Y mientras unos, consciente o inconscientemente, infravaloran la posición del corto dentro del sector del cine español, otros como el Insitut d'Estudis Baleàrics, buscan y colaboran en la promoción de este género. Un ejemplo de ello son Equipajes y su último trabajo El anónimo Caronte, dos cortos del director Toni Bestard que fueron seleccionados por el IEB para promocionarlos en festivales cinematográficos de carácter nacional e internacional.

La producción de 1.500 copias es «una herramienta indispensable para que mi trabajo llegue a las manos oportunas», señaló el director.

Ahora Bestard se prepara para asistir a la presentación de El anónimo Caronte en la XXXIII Edición del Festival de cine Iberoamericano de Huelva, en el que se incluye su corto dedicado a la obra maestra El Verdugo, una producción que se proyectará con motivo del homenaje a la actriz recientemente fallecida Emma Penella.