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CELIA HEREDIA Este año se cumple el octavo centenario del nacimiento de Santa Elisabet de Hungría (1207) erigida como Patrona de la Tercera Orden Franciscana. Por este motivo, en la Iglesia del Monasterio de la Purísima Concepción (Jaquonot, 1) se inaugura mañana una parte de la muestra El Franciscanisme a Mallorca. Art, festes i devocions, dedicada a la santa patrona y a la Casa Real de Mallorca.

La iglesia acoge piezas tan emblemáticas como el mapa de cartografía mallorquina, de 1375, con el que los los curiosos podrán hacerse una idea de como veían el mundo en el XIV o páginas enmarcadas de la Bíblia de San Luís, como muestra de la Bíblia más monumental de Europa.

Las piezas dedicadas a la Casa Real son seis retratos encargados al pintor Andreu Reus. Piezas que, además de dar un toque medieval al templo, idealizan la imagen de los reyes y príncipes de la Casa Real de Mallorca, que vivieron un breve periodo de esplendor (1276-1349), que acabó en tragedia.

Siglos y siglos de conquistas, bodas y nacimientos hacen que sea difícil entender las conexiones entre ellos y la patrona de la Tercera Orden Franciscana, por eso, los visitantes podrán ver tres árboles genealógicos: el de la Casa de Hungría, el de Casa Real de Aragón y el de la Casa Real de Mallorca para que puedan tener una idea más clara de la historia de nuestra Isla.

El montaje principal lo protagoniza una gran pintura en la que aparece Santa Elisabet de Hungría y que escenifica el milagro en el que convierte los panes en Rosas. Una obra que fue encargada al pintor Anckermann por la Reina Isabel II cuando visitó Mallorca. En este montaje también se podrá contemplar una pareja de candelabros monumentales tallados por el escultor Marc Llinàs; El Éxtasis de San Francisco, una escultura de pequeño tamaño protegida por una vitrina y que fue creada por el escultor y ebanista Adrià Ferràn y Vallè. También se puede contemplar la imagen de Ramon Llull y una pequeña pintura de la Purísima.

Se trata de volver a una tradición costumbrista, la escenografía, que se está perdiendo con el tiempo, tiene como objetivo recordar nuestra historia.