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JONAS CLIMENT
El director mallorquín Pedro Riutort participó este año en el Festival Internacional de cine Lésbico y Gay de Madrid, donde se proyectó su cortometraje Carne de Gorila.

Con este nuevo corto, el joven director Pedro Riutort , formado en Mallorca y Nueva York, ha vuelto a la actualidad cinematográfica tras cuatros años sin rodar. El Hambre, su anterior corto, cosechó premios en los festivales de Valladolid, Huelva y Zaragoza.

Carne de Gorila narra la historia de un matrimonio de clase alta que, atrapado en una vida de falsa felicidad y monotonía, decide buscar el placer a través de una serie de experiencias extravagantes. De esta manera, irrumpe en sus vidas una prostituta necesitada constituyéndose un cruel y morboso triangulo de amor. Este último personaje está interpretado por La Prohibida, una drag queen muy popular en los circuitos gay de la península y que ha participado en películas como Chuecatown.

El corto toma su título de una de las experiencias hedonistas de la pareja: la cocina y degustación de un carísimo brazo de gorila que adquieren en el mercado negro. Sobre esta escena, el director explicó que «la comida constituye uno de mis temas recurrentes» y confesó que «me encanta el surrealismo, la ironía y mezclar el lujo con la chabacanería». Por ello, su universo cinematográfico se ha comparado con el de Pedro Almodovar, aunque según explica, «en España tendemos a pensar que él es el único que hace este tipo de cine cuando hay otros referente como John Waters o Fassbinder».

Riutort expresó su intención de estrenarse en el largometraje con En Línea, una comedia de terror con tintes románticos que ha escrito y que espera despierte el interés de alguna productora. Según explicó, «podría rodarse con un presupuesto relativamente bajo de 180.000 euros y me encantaría hacerlo aquí, con actores mallorquines y de la península».

Pedro Riutort se ha instalado de nuevo en la Isla con la esperanza de poder trabajar en el cine, tal y como están haciendo otros directores como Toni Bestard o Rafa Cortés . En este sentido, el director reconoció el potencial de Mallorca destacando su «variada escenografía y actores de calidad» aunque expresó cierta decepción «con unas instituciones que no nos patrocinan lo suficiente».