Alejandro Sanz y Juan Luis Guerra obtuvieron un premio Grammy el pasado domingo en Los Angeles. Pero, sin duda, la gran triunfadora en esta 50 edición de los máximos galardones musicales fue la cantante británica Amy Winehouse, quien obtuvo cinco gramófonos de oro, seguida del rapero Kanye West, con cuatro, y Bruce Springsteen, con tres.
La joven diva del soul británico Amy Winehouse no pudo estar presente en la gala porque la Justicia estadounidense le había prohibió viajar por una condena por posesión de drogas. «Mi Blake, mi encarcelado Blake, y por Londres», dijo la cantante Amy Winehouse, fundida en abrazos en una transmisión vía satélite desde su ciudad, donde está sometiéndose a una terapia de desintoxicación.
La mayor sorpresa de la noche la dio el pianista Herbie Hancock, quien contra todo pronóstico se alzó con el trofeo de Album del Año por su trabajo en River: The Joni Letters.
Justin Timberlake tuvo que conformarse con dos premios a Mejor Vocalista Pop masculino por What Goes Around... Comes Around y a Mejor Canción de Dance por LoveStoned/I think she knows. Mientras que el pegadizo tema Umbrella de Rihanna junto Jay-Z se llevó solo el premio a Mejor Canción de Rap en colaboración.
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