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M. DÍAZ/J. CLIMENT La Orquestra Simfònica de Balears presentó ayer su próximo concierto de temporada, que se celebrará mañana en el Auditòrium de Palma. El repertorio del programa contará con cuatro obras «muy diferentes» y donde destaca, por su «importancia y dificultad», el Don Quixot, op. 35, de Richard Strauss, según explicó Philippe Bender, director titular de la orquesta.

El concierto arrancará con la pieza Bachianas brasileiras núm. 3 para piano y orquesta, de Héitor Villa-Lobos. A continuación se interpretará Rhapsody in Blue, de George Gershwin, con la solista Cristina Ortiz al piano. Tras una pausa, el recital seguirá con la obra Brisas, del mallorquín Llorenç Borràs de Riquer, y donde intervendrá el Cor de Dones de la Capella Mallorquina, a cargo del director Josep M. Moreno.

El compositor Llorenç Borràs explicó que Brisas es una obra de su juventud, inspirada en sus experiencias como submarinista en aguas mallorquinas.
Finalmente, el concierto terminará con la pieza estrella del programa, el Don Quixot, op. 35, de Richard Strauss, donde intervendrán los solistas Emmanuel Bleuse (violoncelo), Sonia Krasnova (viola) y Smerald Spahiu (violín). «Se trata de una obra muy importante para la historia de la música y necesita dos solistas de primera categoría para interpretarla», apuntó Philippe Bender.