Mateu Marcus, Joan Simonet, Joana Lluïsa Mascaró y Biel Cerdà,en la rueda de prensa en la que dieron por hecho que el Estado es el propietario del Castell d'Alaró. Foto: PERE BOTA

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MARIANA DÍAZ

El Estado se puso en contacto con Antonio Ordinas Catalá para hablar del Castell d'Alaró, del que el primero se decía propietario. Fue en 1965. Así lo confirma un documento de la Delegación de Hacienda en Palma de dicha época que el departamento de Cultura del Consell de Mallorca (CIM) entregado ayer a los medios de comunicación.

La consellera de Cultura, Joana Lluïsa Mascaró, compareció para dar cuenta de las «gestiones» que en las últimas semanas ha llevado a cabo el CIM para conocer quién detenta la propiedad de dicho castillo. Tanto para Mascaró, -que estuvo acompañada por el alcalde de Alaró, Joan Simonet; el director insular de Patrimoni Històric, Biel Cerdà, y el presidente de la Fundació Castell d'Alaró, Mateu Marcus-, como para Simonet, el Estado es el «verdadero propietario» de la edificación, aunque ambas administraciones están a la «espera de la respuesta oficial de Madrid».

«Con el fin de practicar las comprobaciones pertinentes en los trabajos que se realizan en esta Sección del Patrimonio del Estado para el perfeccionamiento del Inventario de los Bienes del Estado, ruego a V. se persone en esta oficina (3º piso de la Delegación de Hacienda, calle Cecilio Metelo) con la escritura de propiedad de la finca colindante con el llamado Castillo de Alaró, ya que según ha informado el respectivo Ayuntamiento, V. es propietario de la finca lindante con la propiedad del Estado».

Ésta es la carta oficial escrita desde la Delegación de Hacienda, Sección Patrimonio del Estado, el 27 de enero de 1965. El destinatario fue Antonio Ordinas Catalá, hasta ahora supuestamente primer propietario de la familia Ordinas del Castell d'Alaró, quien, según su nieto, Miguel Àngel Ordinas, lo habría adquirido en 1935 y años más tarde dejado en herencia a uno de sus hijos, Lorenzo Ordinas Pons.

En la misma fecha, el 27 de enero de 1965, de Hacienda salió otro escrito para el Ajuntament alaroner en el que se exigía que la carta anterior se entregara a «D. Antonio Ordinas Catalá, devolviendo la cédula de notificación, debidamente diligenciada», es decir, lo que podíamos llamar acuse de recibo. De este modo, y si no existen papeles que digan lo contrario, Ordinas Catalá tuvo constancia, al menos en enero de 1965, de que el Estado se consideraba dueño del castillo, de las murallas, la puerta de entrada y la Torre de l'Homenatge, que fueron las construcciones que en 1969 el Ministerio de Hacienda pasó al de Educación y Ciencia.

Hasta que el pasado viernes Ultima Hora desveló la existencia de unos documentos que avalaban la propiedad del Estado sobre el Castell d'Alaró, se creía que el propietario era Lorenzo Ordinas Pons. Su hijo Miguel Angel así lo corroboró anteayer, asegurando que la documentación se encuentra en el Registro de la Propiedad de Inca.

Las noticias que vamos conociendo en los últimos días demuestran que el castillo ha vivido en una especie de limbo mientras su estado se ha ido deteriorando. Mascaró aseguró que el Consell intentó contactar en numerosas ocasiones con Ordinas, y que la última vez fue durante esta legislatura, cuando Cerdà, desde Patrimoni, le propuso un convenio de 6.000 euros anuales «por permitir el acceso al público y a cambio lo iríamos restaurando».

En septiembre Mascaró tiene una reunión en el Ministerio de Cultura a propósito del castillo.