Imagen de archivo de la muestra de Mordillo en el Solleric, en 1989.

TW
0

Los deseos profesionales del reconocido dibujante Guillermo Mordillo (Argentina, 1932) se han hecho realidad. Veinte años después de que el artista realizara una exposición en el Casal Solleric de Palma, en el verano de 2009 cumplirá el sueño de volver a exhibir su trabajo en la Isla antes de culminar su carrera y hacer pública su retirada. Así lo reconocía hace casi dos años en una entrevista concedida a este periódico. «Me gustaría volver a exponer en Palma como despedida profesional», aseguró entonces.

Mordillo, que se identifica más como periodista que pintor, vivió durante diecisiete años en la Isla antes de retirarse a Mónaco, donde fijó su residencia. El vínculo con la Isla es fuerte y ahora regresa cada año para pasar unos meses.

Esta exposición antológica, comisariada por Joan Roig y Florentino Flores, le traerá de nuevo a Palma un mes antes de la inauguración. Hasta entonces seguirá trabajando en algunas de las piezas que ha seleccionado para ocupar la planta noble del espacio expositivo.

Después de unos años sin trabajar en un proyecto nuevo, el dibujante se ha concentrado en revisar su extensa obra. De esto modo, según explicó Joan Roig, Mordillo está concentrado en pasar algunos de sus principales dibujos a la técnica del acrílico y a mejorar ciertos detalles. Hay que destacar que la mayoría de sus dibujos están realizados en tinta y no soportan la luz, hasta el punto de no poder exhibirse. Ahora, gracias a esta revisión podrán mostrarse de nuevo en este homenaje, que recientemente han recibido otros reconocidos artistas como Gilbert Shelton.

El comisario adelantó que Mordillo presentará un total de 160 piezas, «cien de ellas son algunos de estos nuevos acrílicos, que podrán verse por primera vez en Palma». El resto, comentó Roig, son tintas que se mostrarán con todas las protecciones necesarias para asegurar su conservación. Joan Roig comparte el comisariado de la muestra con Florentino Flores, quien está trabajando ahora en el texto del cataloga, que dada su calidad y extensión, puede considerarse «casi una publicación», siguiendo la línea del que se editó para la exposición de Shelton o Rafel Vaquer.

Juntos, y asesorados por el propio artista, preparan el contenido de la muestra, que contará, además, con material inédito, bocetos, postales, agendas, y todo tipo de merchandising que, «en estos momentos, está teniendo mucho éxito en China, Corea del Sur o Japón», explicó Roig, quien destacó que en estos países «están realizando ahora cortometrajes animados a partir de sus viñetas». Algunos de estos audiovisuales también se proyectarán con motivo de la exposición en el Casal Solleric.

Precisamente el cine es una de las asignaturas pendientes de Mordillo. El dibujante ha confesado que siempre quiso desarrollar una película muda de dibujos animados, siguiendo con la línea de su trabajo que, tal y como explicó Roig, versa sobre las relaciones de pareja, los animales y el deporte con acciones que tienen una lectura de izquierda a derecha. Y es que Mordillo escribe con imágenes.