Parte interior de la Torre del Homenatge recién apuntalada. g Fotos: B.R.

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BERNAT RAMIS Desde que se inició la reparación urgente del Castell d'Alaró, el pasado mes de julio, se han introducido algunos cambios respecto al proyecto inicial de reforma después de detectar nuevas deficiencias en una de las murallas del conjunto que presenta un estado lamentable. Su consolidación y reforma se ha incorporado al proyecto pese a no estar presupuestada.

Después de las dificultades y los problemas derivados de los destrozos de materiales y el vandalismo que marcaron el inicio de las obras de reforma del Castell d'Alaró, el pasado mes de julio, los operarios trabajan actualmente con normalidad y tienen previsto acabar toda la reforma el mes de marzo del año que viene.

La primera fase de las obras, llamada «de contención urgente», consiste en asegurar las ruinas del Castell d'Alaró. La reforma se inició a principios del mes de julio, se prevé que dure dos meses y está financiada íntegramente por el departamento de Patrimoni del Consell de Mallorca.

El objetivo más urgente que persigue el Consell con esta actuación es detener la degradación inminente de las estructuras del Castell ya que, como se detalla en el proyecto, «el estado general de las ruinas es precario y las zonas a reparar presentan un grado patológico grave».

La fase de contención urgente de las ruinas se ha presupuestado en 34.500 euros e incluye la limpieza de la vegetación del lugar, las mejoras en la barbacana de acceso, la reparación de las murallas del recinto, la reparación de la Torre del Homenatge y la señalización con la finalidad de incrementar la seguridad de los visitantes. Los primeros trabajos se centran ahora en la reparación de la bóveda de la Torre del Homenatge. La humedad que se acumuló durante años sobre la bóveda ha provocado la inestabilidad del conjunto.

Así, los operarios han empezado la reforma asegurando desde abajo el techo de dicha torre con la finalidad de que no se caiga. Cuando terminen de asegurar la cubierta repondrán los elementos desprendidos y los morteros con el objetivo de garantizar la estabilidad de la edificación.