Mallorca exporta su música tradicional a Manresa

La veintena de músicos de Grollers de Sa Factoria, ganadores del concurso Sons de la Mediterrània 2008 en el marco de la feria del año pasado, empezó con tono festivo la representación balear el sábado por la mañana y mostró su capacidad para la fusión de la música tradicional con el funk, el rock y la rumba.

Con xeremies y tambors, Xaloc Música llenó la carpa central de la feria con nuevas canciones basadas en los ritmos más populares entre los cuales se escucharon boleros, fandangos, jotas y polcas. Música Nostra y la voz de Miquela Lladó se avanzaron a la Navidad y ofrecieron el domingo un concierto de villancicos.

Joan Martorell dio a conocer Manual inacabat (per anar per la vida), su proyecto más reciente, creado a partir de textos de Guillem d'Efak, y repasó algunos de los versos más íntimos del malogrado poeta de Manacor, catorce años después de su muerte. Los hermanos Martorell recurrieron a la tradición musical de Mallorca para que los asistentes bailaran.

Además, el jueves, primer día del festival, el grupo catalán La Patacada escenificó La disputa de l'ase, un espectáculo musical inspirado en la obra homónima escrita por el mallorquín Anselm Turmeda en el año 1418. La compañía Tutatis representó un pasacalles con caballos de madera que tiene en la fiesta ecuestre de Ciutadella a su principal referente. La asociación Mapasonor, por su parte, presentó el documento pedagógico Música a Mallorca i Menorca y el proyecto Oïdes Mediterranis, dirigidos a profesores que quieran emplear las músicas mediterráneas como herramienta de integración para los niños de otras culturas. Un estand institucional de la Conselleria d'Educació i Cultura completó la presencia balear en Manresa y proporcionó información sobre la música que se produce en las Islas.

La característica que define mejor la Fira Mediterrània son las actuaciones gratuitas en la calle y en las carpas de algunas plazas. No obstante, de los 60 espectáculos de pago durante los cuatro días del festival, se agotaron las entradas de 14 de ellos. De los 1.063 programadores acreditados, en busca de espectáculos susceptibles de ser contratados en otras localidades, el diez por ciento tuvo procedencia internacional.