Así se desprende de la propuesta de programación que el alcalde de Pollença, Joan Cerdà, ha recibido del director artístico del festival, Joan Pons, que ha debido ajustarse a un presupuesto municipal de 220.000 euros después de que el Consistorio haya perdido la subvención nominal que hasta ahora le llegaba a través de la Conselleria de Turisme del Govern balear y que ascendía a 180.000 euros.
Fuentes de Turisme confirmaron ayer que el Ajuntament aún puede acogerse a una línea de subvenciones abierta cuyo plazo de solicitudes concluye el próximo jueves 2 de junio. Admiten que «la convocatoria ha salido algo tarde este año», lo que complica las contrataciones del Festival de Pollença, que comienza a principios de julio, de manera que la firma de los contratos con los artistas no se puede demorar más si no se quiere correr el riesgo de que comprometan las fechas en otros certámenes. De ahí que el alcalde, Joan Cerdà, haya encargado al director artístico del Festival que realice una propuesta de programación ajustada al presupuesto real de 220.000 euros. Joan Cerdà confirmó ayer que el Ajuntament enviará hoy por mensajero la solicitud de la subvención a Turisme de manera que «si finalmente llega el dinero miraremos de programar nuevos conciertos».
Los aprietos económicos llegan en el peor momento para el Festival, en el cincuenta aniversario de su creación. Hace un año, en la apertura de la edición número 49, el alcalde anunció la intención de «que el Festival salga de los meses de verano con un concierto por octubre», algo que hoy parece un imposible.
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