«La obra representa las formas de una mujer embarazada», reconoció el artista, quien explicó que «es un homenaje a todas las mujeres víctimas del franquismo, pero no solo a las fusiladas, sino a todas las represaliadas. Esta escultura refleja que la memoria perdura, no con ánimo de venganza, sino como homenaje».
Continuidad
El teniente de alcalde de Cultura, Fernando Gilet, resaltó que «con la colocación de esta obra damos continuidad a una actuación que se inició durante la legislatura pasada. La escultura es un símbolo de encuentro, con la perspectiva del pasado, pero mirando hacia delante y al futuro con esperanza». Por este motivo, Gilet se reunió con su antecesora en el cargo, Nanda Ramon, acompañados por el secretario autonómico de Educació, Guillem Estarellas; el diputado de Més, Biel Barceló; la directora gerente de la Fundación Palma Espai d'Art, Pilar Ribal; la coordinadora general de Cultura, María José Massot, y representantes de los diferentes grupos políticos.
2 comentarios
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Espero que juntos, pero no revueltos.
Bloc o PP, les institucions es mantenen i perduren.