Francesc Grimalt, en su estudio La Madriguera. | Pilar Pellicer

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Alemania y Francia son las próximas paradas de la obra del ilustrador mallorquín Francesc Grimalt, cuya popularidad se ha disparado más allá de nuestras fronteras gracias a las redes. De hecho, ya hay una editorial francesa interesada en el cómic El caballero del Crepúsculo. Se trata de «un western con naves espaciales y alienígenas, muy influenciado por la estética de Dune». Aunque no está terminado, Grimalt va a cerrar el contrato con la editorial francesa cuyo nombre no se atreve aún a adelantar) para que salga a la venta en otoño del año que viene.

El autor confiesa su ilusión por «ilustrar una fantasía galáctica, muy barroca y de estilo victoriano». El guión corre a cargo de Francesc Grimalt Ramon, su sobrino, con quien ya colaboró en Noche de oscuras revelaciones (Apache Libros). Esta obra cuenta con más de 100 páginas con elaboradas ilustraciones que le ha puesto a prueba en el confinamiento.

Está en racha, ya que acaba de vender a Alemania los derechos de su trilogía Los niños raros, formada por Sanatoria, Míseres y El niño de oro.

Encargos

Pese al parón cultural por la pandemia, Grimalt no ha parado de recibir encargos. Hace un mes terminó las ilustraciones del libro Polvo (Santillana), obra del escritor mexicano Toño Malpica, muy conocido en la literatura juvenil iberoamericana. Se trata de una distopía futurista «que tiene mucho de La máquina del tiempo de H.G. Wells y 1984».

Mientras tanto ha tenido que dejar de lado una interesante propuesta: un cómic distópico para DC Comics. «Ya tengo suficiente distopía con la que vivimos», dice.

Grimalt combina estos trabajos con sus clases de ilustración en el colegio L'Asunció de Binissalem. Todo un reto en estos tiempos pero al que no piensa renunciar porque «mis alumnos son una fuente de ideas».

Ilustración del libro ‘Polvo'.