Vas guardando la suciedad bajo la alfombra hasta que, de lo abultada que está, tropiezas. La metáfora es burda, pero seguro que el lector sabe a lo que me refiero. Y en cierto sentido no pasa nada cuando se trata de algo que afecta solo a uno mismo, pero ¿qué pasa si la decisión afecta a todo un pueblo? La toma de decisiones de los políticos son importantes precisamente porque afectan a todos, pero se nos olvida a veces que el cargo de turno no deja de ser un individuo concreto y que, lo que haga en su casa, puede que lo haga en el despacho. Esta idea es la que explora Miguel Ángel Marqués en su nuevo cortometraje, Urtajo, para el que ha contado con el reputado actor José Luis García Pérez.
En el filme vemos a un hombre conduciendo un coche cuando recibe una llamada en la que le informan de que ha habido un vertido que amenaza con contaminar el agua de varios municipios. Señala el mallorquín que la idea surge de la «necesidad de reflexionar sobre cómo la política se ve influenciada por intereses personales del político de turno».
Por ello, a través de Urtajo, Marqués destaca que hay ocasiones en las que «quien se supone que representa a un colectivo al final solo representa a su interés individual», haciendo estribar la duda de «¿cuál prima por encima del otro?», siendo para Marqués el principal problema de este país que lo individual tiende a sobrepasar a lo colectivo.
Por otro lado, la temática escogida del vertido tiene que ver con el interés de Marqués por lo medioambiental. «Todas las generaciones han tenido algo: la Guerra Civil, el Franquismo, y lo que nos toca a nosotros es el medioambiente», destaca el cineasta que juzga se trata de un tema «que a los jóvenes nos preocupa mucho».
La casualidad hizo que a la hora de construir la historia, el punto central es que la empresa que contamina se halla en un terreno no edificable recalificado a cambio de favores. Las inundaciones y la gestión de las mismas pueden recordar a lo ocurrido en Valencia con la DANA, y Marqués reconoce que esta coincidencia les puede «ir bien o mal», aunque matiza que el corto se rodó hace meses. En cualquier caso, si les da un empujón, él confía en que «no sea por esto» y, de hecho, lanza la siguiente pregunta: «Mejor reflexionemos sobre cómo es posible que en verano escriba un guion que refleja lo que pasaría meses después en Valencia. Lo triste es que a nadie le sorprende».
Precisamente esto último es también uno de los motivos para llevar a cabo Urtajo, que «en España, la política va así, priman los intereses personales, del partido o de la empresa que financia al partido». Y a pesar de lo que pueda parecer, Marqués no marca una frontera entre políticos y ciudadanía, sino que cree que «la clase política no es más que un reflejo de cómo es la gente. El egoísmo está en todas partes».
Interpretación
Marqués no ha podido contar con mejores compañeros de viaje para narrar esta historia delante y detrás de cámaras. El reputado actor José Luis García Pérez es quien encarna al político corrupto y el mallorquín lo tiene claro: «Fue mi primera opción». Se da la circunstancia de que el actor no hacía cortos desde hace 18 años, por lo que el que haya querido hacer este es un «valor añadido». «Es un «actorazo y todo lo que hace es tan creíble que no me podía creer que yo lo hubiera escrito», confiesa Marqués.
Por otro lado, Urtajo es la primera producción de Baldufa Films como sello profesional. La productora del isleño, formada junto a sus dos socios Pablo Pérez y Esmeralda Bravo, aspira a ser un espacio de cine de autor donde los cineastas que quieran trabajar con ellos tengan «rienda suelta». La presentarán el próximo 9 de enero en la Sala Augusta. Urtajo, el segundo trabajo de Marqués tras Zama, ya cuenta con la importante distribuidora Selected Films y aspira a poder verse en importantes festivales de cine en los próximos meses.
2 comentarios
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Miris on miris, tot són guirisSe te olvidó meter en la lista, las mascarillas de tu amiga Armengol.
Aquí de corruppció en sabem bastant. Encara mos queden 30 anys de pagar el palau de congresos, el palma arena i demés de'n Mates.