La convocatoria electoral adelantada al 28-A puede situar al PSOE como primera fuerza política tras los dos descalabros anteriores. | Redacción Local

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Ningún partido de Baleares estaba preparado para el adelanto electoral de las generales y la convocatoria anticipada de Pedro Sánchez ha obligado a cambiar la estrategia de todos ellos. Por ejemplo, el resultado de las elecciones autonómicas en las Islas tenía que condicionar la confección de las listas al Congreso y Senado, de forma que alguno de los perdedores podía haber acabado en las listas a las generales, pero Sánchez ha hecho que todo volara por los aires y las estrategias han cambiado. También es complicada la situación en la que algunos partidos de las Islas llegan a estas elecciones.

PP: un momento muy complicado para los ‘populares'

La convocatoria electoral no podía llegar en peor momento para los ‘populares' de las Islas. Temen un mal resultado derivado del auge de Vox, partido de moda entre las derechas. El goteo de afiliados que se van está teniendo efectos negativos en la moral de los militantes aunque en la cúpula se le resta importancia. Para el PP, la pérdida de votos es doble, hacia Ciudadanos y hacia Vox, y el consuelo que queda entre los dirigentes es que el mal resultado que se espera en las generales haga reaccionar a los votantes en las autonómicas, que serían así una suerte de segunda vuelta. También hay problemas para elegir a los candidatos y no está claro que Teresa Palmer repita en las listas. Entre los nombres que apuntan algunos cargos del PP está el de Sebastià Sagreras, pero si algo coinciden todos es que se hará lo que decida Gabriel Company.

PSOE: el objetivo es ser el más votado y tres diputados

La situación del PSOE es radicalmente diferente a la del PP y a la suya misma hace apenas tres años, en las últimas elecciones generales. Los socialistas están en fase de ascenso hasta el punto de que aspiran a convertirse en la lista más votada y lograr tres diputados, un avance sustancial si se tiene en cuenta que hace tres años quedó en tercera posición. Confían en este logro por la fragmentación de la derecha, especialmente del PP, donde se espera dispersión de voto. Sin embargo, también en el PSOE hay problema en la confección de la lista. Está claro que Sofía Hernanz será la número dos, pero nada hay decidido sobre el número uno, que ahora mismo se disputan extraoficialmente Pere Joan Pons y la secretaria de Estado de Turisme, Bel Oliver. La solución puede ser salomónica y que uno de ellos acabe siendo el candidato al Senado.

Podemos: a la baja y con un candidato desconocido

Las buenas expectativas del PSOE se basan en las malas expectativas de Podemos. La formación morada reproduce en las Islas la profunda división que hay en toda España y el descontento del ala más de izquierdas de la formación puede acabar en una mayor abstención en sus filas. Tampoco ayuda que se haya apostado por un perfil desconocido de una militante de base, una diferencia enorme con la candidatura presentada hace tres años, encabezada por el juez Juan Pedro Yllanes. Podemos tiene ahora dos diputados en el Congreso pero se expone a perder uno de ellos en favor del PSOE. El perfil bajo de esta campaña electoral le puede pasar factura a una formación que se enfrenta al desencante de sus bases cuando apenas han pasado cinco años desde que se constituyó como partido.

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Ciudadanos pretende que su fichaje estrella, el del exsocialista Joan Mesquida, se convierta en un revulsivo que le otorgue dos diputados. Mesquida es un cartel de relumbrón y podría captar votos de ese PSOE más crítico con el intento de diálogo de Pedro Sánchez con sectores del independentismo catalán. También aspira a robar votos al PP, pero esta hemorragia parece haberse frenado en favor de Vox. Ciudadanos confía en lograr dos diputados, pero está por ver qué efectos tendrá el anuncio del ‘fichaje' de Bauzá como asesor de Albert Rivera, que ha molestado mucho a la cúpula de Balears. Todos coinciden en que pocos votos aportará este fichaje a la formación.

Més, frente a su peor escenario electoral posible

Si a algún partido ha pillado estas elecciones con el pie cambiado ha sido a Més. Reconfortado por el archivo del ‘caso Contratos', pese a ello Més sabe que no tiene la más mínima opción de conseguir nada, pero aún así no les queda más remedio que concurrir a las elecciones para que se vea que están y para llenar minutos de informativos. El candidato será el coordinador de la formación, Guillem Balboa.

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