TW
0

Los ministros de Exteriores de la UE respaldaron ayer las líneas básicas de la futura defensa europea, que permitirá a la Unión dotarse de una Fuerza de Reacción Rápida de entre 50.000 y 60.000 soldados para hacer frente a situaciones de crisis en las que no intervenga EEUU.

No obstante, algunos países quieren que los líderes comunitarios incluyan en el documento final que aprobarán en la cumbre que los reunirá en Helsinki a finales de esta semana que dicha fuerza «no será un ejército europeo».

La propuesta de Irlanda, uno de los cuatro países neutrales de la UE, fue apoyada por varios países, entre ellos el Reino Unido. Londres quiere tranquilizar de esa manera los temores surgidos en Estados Unidos de que la Unión Europea este dotándose de una política común de defensa con el fin último de competir con la OTAN en ese terreno.

«Para España, como creo que para todos los demás, está muy claro que la defensa europea no tiene que edificarse en perjuicio de la OTAN, sino reforzar el brazo europeo de la Alianza», señaló el ministro español de Exteriores, Abel Matutes.

También dijo que los Quince han aceptado el informe presentado por la Presidencia de turno finlandesa sobre la Política de Seguridad y Defensa Europea, base del documento que será aprobado por los jefes de Estado o gobierno en Helsinki.

Los líderes europeos deberán aclarar en la reunión de Helsinki las relaciones de la UE con la OTAN en el marco de la defensa europea.