Numerosos enfrentamientos entre palestinos y soldados israelíes salpicaron la «jornada de la ira».

TW
0
EFE-JERUSALÉN Tras conocerse la abrumadora victoria del candidato derechista, Ariel Sharon, quien según el escrutinio de las primeras cien mesas lleva una ventaja de 27'7 puntos sobre Barak, éste pronunció una alocución ante sus seguidores concentrados en un kibbutz al norte de Tel Aviv, a los que comunicó que abandona «temporalmente» la vida política. Esta ventaja -que ya apuntaban los sondeos a pie de urna- constituye una de las más apabullantes victorias registradas en unas elecciones en toda la historia de Israel.

«Quiero deciros que cuando se forme el nuevo Gobierno, tengo la intención de abandonar la dirección del Partido Laborista y mi escaño en la Knesset (Parlamento), pero no me voy; me tomo una pausa en la vida pública después de 41 años, y voy a seguir siendo militante laborista», dijo Barak. El presidente de la Autoridad Nacional Palestina (SNP), Yaser Arafat, dijo al poco de conocer los primeros datos que espera que a pesar de la victoria de Sharon en las elecciones, pueda continuar el proceso de paz, y precisó que respeta la decisión de los israelíes. El ex primer ministro israelí Benjamín Netanyahu manifestó que el resultado de los comicios «muestra que los ciudadanos de este país han repudiado la política de fracaso» de Ehud Barak.

La posibilidad de que se forme un gobierno de unión nacional, muy comentada durante la campaña electoral, fue ayer rechazada por el todavía ministro de Asuntos Exteriores, Shlomo Ben Ami, uno de los mejor situados para tomar el relevo de Barak al frente del laborismo tras lanzarse la idea desde el partido derechista del Likud. Ben Ami, también titular de Seguridad Interior, expresó su disconformidad con la formación de un gobierno de unidad nacional, pues «ahora hay que dar una oportunidad a una nueva alternativa», dijo.

«Debemos hacer examen de conciencia en la oposición», agregó Ben Ami, quien reiteró, no obstante, que «el camino que hemos seguido estos dos últimos años ha sido el correcto.» Respecto al resultado de los comicios, Ben Ami felicitó a Sharon, pero «le recomiendo que no se embriague con la victoria». Por su parte, el jefe de la seguridad palestina de Cisjordania, Yibril Rayub, uno de los hombres más próximos a Arafat, calificó la victoria de Sharon de «un desastre para Israel y para la región».