El presidente de Montenegro, Milo Djukanovic, es un antiguo aliado
de Slobodan Milosevic pero se ha convertido en su mayor adversario,
y desea hoy conducir la pequeña república yugoslava a al
independencia.
Este brillante economista de 39 años, formado en el colegio
comunista, ha llevado a cabo una carrera política fulgurante.
Nombrado en 1991, a la edad de 29 años, a la cabeza del Gobierno de
Montenegro, fue elegido como su presidente en octubre de 1997.
Muy pronto, Djukanovic comenzó a manifestar abiertamente su
postura a favor de una amplia autonomía de Montenegro frente a
Serbia, su socio desde abril de 1992 en el seno de la República
Federal de Yugoslavia (RFY). Al cabo de los años se ha ido alejando
cada vez más de la política de Milosevic.
«Milosevic es un político acabado, incapaz de elaborar una
estrategia (...), está conduciendo a la Federación yugoslava hacia
una catástrofe política y económica», declaró el líder secesionista
antes de lanzarse en 1997 a la lucha presidencial.
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