El presidente de Siemens, Heinrich von Pierer, ayer en Munich.

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EUROPA PRESS-BUDAPEST/PARÍS La multinacional alemana Siemens anunció ayer que recortará 6.100 puestos de trabajo en el área de telecomunicaciones, en la que 3.500 trabajadores serán despedidos y otros 2.600 trabajadores eventuales no serán renovados, después de que el beneficio neto de la compañía cayó en el segundo trimestre de su ejercicio fiscal 2000-2001 (octubre 2000- septiembre 2001) hasta los 96.171 millones de pesetas (578 millones de euros), un 11 por ciento menos que en el mismo período del ano anterior.

Igualmente, el grupo franco-italiano Moulinex-Brandt suprimirá 4.000 empleos en Europa y cerrará seis fábricas en distintos países tras registrar unas pérdidas netas de 21.630 millones de pesetas en el año 2000, informó ayer el fabricante de electrodomésticos. La compañía anunció que 1.700 de los 4.000 empleos suprimidos en el marco de un plan de reestructuración afectarán a los trabajadores de Polonia. La plantilla de Moulinex en Francia sufrirá un recorte de 1.500 personas.