El presidente iraquí, Sadam Husein, ha galardonado con la más alta
condecoración de Irak a las dos mujeres suicidas que causaron esta
semana la muerte a tres soldados de Estados Unidos en un puesto de
control, según informó la televisión iraquí.
Las dos «mártires» por la causa, fueron galardonadas a título
póstumo con la medalla Rafidén (Mesopotamia), mientras que sus
familias recibieron cada una 100 millones de dinares, unos 33.000
dólares.
Asimismo, el presidente iraquí, Sadam Husein, también entregó a
las dos mujeres que atentaron contra las tropas aliadas la Medalla
al Valor, agregó el informativo de la televisión.
El presidente iraquí ordenó, por otra parte, recompensar con 100
millones de dinares a todos aquellos que logren destruir un
cazabombardero enemigo.
Con 50 millones de dinares, 16.500 dólares, se recompensará a
quien logre derribar un helicóptero de la coalición
anglo-americana, y con 25 millones de dinares, 8.000 dólares, al
que destruya un tanque. Con esta misma cantidad se gratificará a la
persona que consiga matar a un soldado enemigo.
Sadam Husein, pidió ayer a los combatientes iraquíes que se unan
a cualquier unidad disponible para plantar batalla a las fuerzas
invasoras anglo-estadounidenses.
El discurso de Sadam, Comandante en Jefe Supremo del ejército,
fue leído por un locutor ante la televisión iraquí e iba dirigido
«a todos los miembros de las Fuerzas Armadas».
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