El Ayuntamiento de Eivissa remitió la pasada semana a la
conselleria balear de Medi Ambient el informe, realizado por
expertos de la empresa alemana S&H GmbH & Co tras la visita
el pasado abril de la depuradora de Eivissa, en el que se propone
la instalación de un filtro biológico para acabar con los malos
olores de la planta.
El concejal responsable actualmente de Personal y Vías Públicas,
Toni Roldán, afirmó que «si es cierto lo que se dice en el informe
y se garantiza que los olores van a acabar sería bueno considerar
la propuesta siempre que la conselleria balear de Medi Ambient lo
permitiera», ya que el Instituto Balear de Saneamiento (IBASAN),
dependiente de esta área, es el responsable de la depuradora.
El edil aseguró que por parte del Consistorio «habrá absoluta
colaboración con el Govern y el Consell para intentar solventar los
problemas de la depuradora de la misma manera que la hubo hace
cuatro meses cuando estas instituciones estaban todavía en manos
del Pacte Progressista». Asimismo, reiteró que «que el Ayuntamiento
está trabajando desde hace cuatro años para intentar colaborar en
la medida de lo posible para solventar los problemas de la planta»
y recriminó al Consistorio de Santa Eulària que no se haya
preocupado por el tema, teniendo en cuenta que a estas
instalaciones llegan también las aguas residuales de este municipio
y de hecho la depuradora está ubicada dentro de la zona de Santa
Eulària.
Por otra parte, Roldán recordó que la corporación municipal ha
estado colaborando con la conselleria balear de Medi Ambient para
intentar anular las fosas sépticas que hay en el municipio y apuntó
que durante el año pasado se llegaron a detectar y eliminar más de
300. El concejal señaló que estas fosas sépticas crean también
malos olores cuando llegan allí todas las aguas residuales.
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