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La construcción de la Torre de la Libertad en Nueva York, donde se alzaba el World Trade Center, comenzó ayer, Día de la Independencia de EEUU, tras quedar desvelado el primer bloque de piedra que será parte de su estructura.

El bloque de granito de 20 toneladas, en el que aparece una inscripción en honor a las víctimas de los atentados del 11-S de 2001 y al perdurable espíritu de la libertad, fue presentado en una ceremonia a la que asistieron autoridades de la ciudad y del estado de Nueva York, así como líderes comunitarios y familiares de las víctimas.

La Torre de la Libertad, que estará emplazada en la zona que ocupaban las Torres Gemelas, será el rascacielos más alto del mundo, con 1.776 pies de alto -cifra que se corresponde con el año de la independencia de EEUU-, unos 541 metros.

El gobernador de Nueva York, George Pataki, señaló que la primera piedra es «el nuevo símbolo de la fortaleza y la confianza de EEUU». «Hoy colocamos la primera piedra de un nuevo símbolo de esta ciudad y de este país y de nuestra resolución frente al terrorismo. Hoy construimos la Torre de la Libertad», señaló Pataki.

El alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, indicó que «al poner esta primera piedra de esperanza estamos enviando un mensaje al mundo de que la libertad siempre prevalecerá».

«La guerra que libramos ahora contra el terrorismo requiere de coraje, y nuestras libertades siempre serán la fuente de nuestro coraje», agregó Bloomberg. Otro de los políticos presentes en este acto emotivo y patriótico fue el gobernador de Nueva Jersey, James McGreevey.