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El Ejército israelí, que continúa con su ofensiva militar contra el campo de refugiados de Yabalia por sexto día consecutivo, mató ayer en la franja de Gaza a ocho palestinos, las últimas víctimas un niño de 4 años y una joven de 14 años de edad.

Loai al Nayar, de 4 años, murió mientras jugaba en la calle, en Al Juza, en el extremo sur de la franja de Gaza y cerca de la valla que separa ese territorio de Israel. Al parecer, soldados israelíes en dos vehículos blindados que acompañaban a una excavadora militar, que arrasaba terrenos de cultivo palestinos, al este de Al Juza, dispararon en dirección a Al Nayar a quien mataron de un tiro en la cabeza. Fuentes militares israelíes negaron que el Ejército efectuase disparos en esa zona.

Horas antes, un helicóptero de combate israelí mató con su ametralladora a Islam Duidar, una niña de 14 años que se encontraba al este del campo de refugiados de Yabalia. En esa misma zona, soldados israelíes mataron a Ramzi Hasab Ala, de 20 años, cuando entró, por error según fuentes palestinas, en una zona donde operaba el Ejército israelí.

Muhamad al Hisi, de 24 años, fue muerto horas antes por disparos de ametralladora en el barrio de Tel al Zatar, en la entrada norte de Yabalia. Por su parte, el Consejo de Seguridad de la ONU convocó ayer una reunión de urgencia sobre la escalada de violencia en la Franja de Gaza, según informó el embajador británico en la ONU, Emyr Jones Parry.

En el encuentro, el embajador de Argelia en la ONU, Abdalá Baali, presentó en nombre del grupo de países árabes en la ONU un proyecto de resolución, añadió Jones Parry. «La situación es increíblemente mala en Gaza y es normal que el Consejo de Seguridad se ocupe de ello. Vamos a pedir una reunión pública, una reunión urgente e inmediata», declaró Baali.