El gobernador de California, Arnold Schwarzenegger, acompañó a George W. Bush en el mitin celebrado ayer por el presidente en la ciudad de Columbus (Ohio).

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RAFAEL CAÑAS-WASHINGTON
El presidente de EEUU, George W. Bush, y el candidato demócrata, John Kerry, se enfrentaron ayer duramente sobre la lucha contra el terrorismo tras la divulgación del vídeo de Osama bin Laden, cuyo impacto en las elecciones es difícil de medir. El vídeo de Bin Laden con ataques al presidente de EEUU y recuerdos de los atentados del 11 de septiembre, puede suponer un auténtico golpe en la recta final de la campaña electoral, a sólo pocos días de los comicios del próximo martes.

«Fue un error desviar nuestras fuerzas de Afganistán para lanzarnos a una guerra en Irak sin un plan para ganar la paz», acusó y prometió encabezar una guerra «más inteligente y eficaz» contra el terrorismo. Los analistas no se ponen de acuerdo sobre el alcance electoral que pueda tener el vídeo de Bin Laden. Los más neutrales estiman que no tendrá repercusión, ya que los estadounidenses tienen muy claro que el líder de Al Qaeda es enemigo de todo el país.

Se trata de lo que los analistas políticos de este país consideran «la sorpresa de octubre», un acontecimiento inesperado capaz por sí solo de desequilibrar la balanza en favor de uno de los candidatos. Ambos aspirantes a la Casa Blanca, después de haber enviado el viernes mensajes de unidad nacional frente al terrorismo, lanzaron ayer ataques contra su rival basados en el vídeo.

Bush, en un mitin en Grand Rapids (Michigan) dijo que «los terroristas que mataron a miles de inocentes siguen siendo peligrosos y están decididos». Además, dejó claro que «el resultado de esta elección establecerá la dirección de la guerra contra el terrorismo». El presidente atacó a su rival demócrata con el argumento de que sería débil contra el terrorismo: «Kerry ha elegido el sendero de la debilidad y la inacción», afirmó.

Por su parte, Kerry recordó que Bush dejó escapar a Bin Laden de las montañas afganas de Tora Bora, en diciembre de 2001, por no enviar a suficientes tropas estadounidenses en su búsqueda, y después centró las energías en la guerra de Irak, donde no había armas de destrucción masiva.