Prodi departió muy relajado con los líderes de su coalición.

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El primer ministro italiano saliente, Silvio Berlusconi, anunció ayer que presentará su dimisión el próximo martes, durante su último Consejo de Ministros, horas después de que el líder de centro izquierda y próximo jefe del Ejecutivo, Romano Prodi, lograra imponer a sus candidatos a la Presidencia de la Cámara de los Diputados y el Senado.

No obstante, la prensa italiana ha señalado recientemente que el presidente podría cambiar su decisión y encargar él la formación de Gobierno para evitar más retrasos y que la transición política sea más rápida. Nada más confirmarse su elección, y antes de entrar en la sala a pronunciar su discurso de investidura, Bertinotti dedicó su designación «a los obreros y obreras». Ya en el interior, y tras expresar su agradecimiento, consideró que «el primer papel que nos corresponde a todos nosotros es revalorizar el papel del Parlamento». Por ello, «el pueblo debe prestar toda su confianza a las instituciones democráticas para ser libre de todos los yugos que existen, partiendo de la mafia», agregó.

De esta manera, 'Il Cavaliere' deja libre el camino para que Prodi forme Gobierno. «El Consejo de Ministros ha sido previsto para el martes», declaró ayer Berlusconi a los periodistas. Se espera que durante esta reunión, el Gabinete formalice su dimisión.

Prodi, cuya coalición de centro izquierda se hizo con la victoria electoral este mes, debe recibir ahora el mandato del presidente de Italia para formar un nuevo Gobierno. Sin embargo, se desconoce cuándo tendrá lugar, ya que el mandato del presidente Ciampi expira el próximo 18 de mayo, y él ha manifestado sus deseos de que sea su sucesor quien encargue la formación del Ejecutivo al futuro primer ministro.

Ayer por la mañana, el líder de Refundación Comunista y candidato del centro-izquierda a presidir la Cámara de Representantes, Fausto Bertinotti, fue elegido presidente de la Cámara Baja del Parlamento italiano en la cuarta votación. En un acto posterior, Franco Marini fue elegido presidente del Senado.

Bertinotti, que en esta ocasión necesitaba la mayoría absoluta de los votos en lugar de la mayoría de dos tercios obligatoria en las tres primeras vueltas, se hizo con 337 votos, mientras que el secretario de Democráticos de Izquierdas, Massimo D'Alema, obtuvo 100 votos. Además, 144 diputados votaron en blanco.

La elección de Bertinotti en la cuarta votación ya estaba prevista, pues para que un candidato pueda ser elegido como presidente en la primera votación necesita dos tercios, que son 420 votos, mientras que el centro-izquierda sólo cuenta con 348 escaños. De hecho, en la anterior legislatura ocurrió lo mismo y el ex presidente de la Cámara, Pier Ferdinando Casini, fue elegido también en la cuarta votación con 343 votos.