J. L. GARCÍA LLAGÚES01/12/06 0:00
TW
0

Menorca atrajo a un total de 996.228 turistas entre mayo y octubre de este año. Los resultados de la pasada temporada alta dejan entrever un cierto estancamiento en el principal motor económico de la isla -el índice global de visitantes aumento un 0'1%, lo que equivale a 1.080 turistas más-, siendo el mercado nacional el único que registra un crecimiento notable.

De hecho, el aumento de las visitas procedentes del resto de España (28.037 turistas más que hace dos años, un 15% más que en 2005) ha cubierto el descenso registrado en los principales mercados extranjeros, ya que han disminuido las llegadas con origen en Alemania, Gran Bretaña e Italia -cifrado en un 5'2% menos que hace dos años-.

Por ello, Francisco Tutzó, presidente de la fundación Turismo Menorca valoró que «la verdad es que hemos cumplido nuestros objetivos de forma parcial, nuestras acciones han tenido incidencia en el mercado español pero aún no hemos conseguido parar el descenso de los mercados europeos».

El presidente puso especial hincapié en la situación del turismo británico, «hemos suavizado el ritmo decreciente de los últimos años, ya que solamente hemos registrado un descenso del 1'7%, frente al 7'2% de la temporada anterior».

Estacionalidad
Otro de los datos que destacan es el grado de estacionalidad. El turista español es parte clave en este problema, ya que el 58'3% de las visitas procedentes de España tuvieron lugar durante la temporada alta.

Por contra, los visitantes allende nuestras fronteras prefieren dispersar más sus llegadas a la isla, ya que el 60% de las llegadas tuvieron lugar en temporada media-baja.

Por su parte, Bartomeu Riudavets apuntó que «los resultados nos permiten ver que aún nos quedan muchas cosas por hacer, hemos podido comprobar que en los mercados europeos -la situación es flagrante en Centroeuropa y los países nórdicos- hay un desconocimiento total de lo qué es Menorca y de lo que ofrece a los visitantes... muchas veces nos confunden con una barriada de Mallorca-.

El gerente apuesta por cambiar la tendencia, «debemos demostrar que Menorca tiene su propia autenticidad, los destinos turísticos del Mediterráneo están definidos por las cinco eses -sea, sun, sand, sex, sangría- y nuestra oferta va mucho más allá, por eso somos un destino más caro que el resto, ahora hay que publicitarlo».