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La Bolsa de Nueva York cerró anoche con una caída del 4'06 por ciento en el Dow Jones de Industriales, pese al rescate de la aseguradora American International Group (AIG) por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos. El Dow Jones de Industriales, el índice más importante de Wall Street, bajó 449'36 puntos (4'06%) hasta 10.609'66 unidades, tras el cierre de los 30 valores que lo componen en rojo. El lunes el Dow Jones registró su mayor descenso desde los atentados del 11 de septiembre de 2001, al caer un 4'42% lastrado por la quiebra de Lehman Brothers y la venta de Merrill Lynch a Bank of America y el martes se había recuperado levemente un 1'3%.

El rescate de AIG no logró tranquilizar a los inversores, que se preguntan quién será la próxima víctima de la crisis financiera. Las acciones de esta aseguradora lideraban los descensos en el Dow Jones al perder un 45'33% de su valor y cerrar a 2'05 dólares, después de que la Reserva Federal se viera obligada a acudir a su rescate con un préstamo de 85.000 millones de dólares para evitar su colapso.

Los inversores se encuentran preocupados por el futuro de los bancos de inversión Morgan Stanley y Goldman Sachs, cuyas acciones bajaron hoy un 24'22 y un 13'92%, respectivamente. Los inversores y los analistas se preguntan ahora si estos dos bancos de inversión necesitan asociarse con bancos comerciales, cuyos depósitos son más estables, para garantizar su supervivencia.

De las cinco grandes entidades bancarias de inversión que había en Estados Unidos antes de que la crisis financiera sacudiera los cimientos de Wall Street, sólo Goldman Sachs y Morgan Stanley continúa siendo independientes. «Los riesgos del sistema financiero y de la economía siguen siendo enormes y aumenta la presión a la baja de los precios de los activos y del valor del colateral», advirtió la firma de análisis Global Insight.

Añadió que «el telón de fondo económico previo al estallido en el sistema financiero tiene problemas: la producción industrial podría bajar bruscamente en el tercer trimestre, se espera que el consumo se contraiga y la tasa de desempleo aumente con fuerza».