Media Europa se hiela a la espera de que Rusia abra el grifo del gas

Por su parte, el comisario de Energía, Andris Piebalgs, consideró que «ya no hay excusas» para que no se reanude «de forma inmediata» el suministro de gas destinado a Europa, después de haber alcanzado un acuerdo entre todas las partes sobre los observadores. En concreto, la misión de observación estará formada por 22 expertos, incluídos 18 técnicos de compañías de gas y cuatro funcionarios, y a ellos se sumarán representantes ucranianos y rusos.

En conversaciones telefónicas con el presidente de la Comisión Europea, Jose Manuel Durao Barroso, Putin se comprometió a reanudar el envío de gas a Europa a través de Ucrania en el momento en el que lleguen los observadores, según informó el portavoz del Ejecutivo, Pia Ahrenkilde.

Barroso confirmó que «el grupo incluye también observadores grupos de Gazprom en Ucrania y de ucranianos de Naftogaz en Rusia.
En este sentido, el primer grupo, formado por un alto funcionario de la Comisión y técnicos de compañías de gas europeas se desplazó ya hasta Kiev, donde ya han comenzado su misión, en la estación de entrada de Ukrtransgas, situada en la propia capital Ucraniana.

Por este motivo, el comisario de Energía, Andris Piebalgs, consideró que «ya no hay excusas» para no reanudar de forma «inmediata» el suministro de gas ruso.

En estos términos se expresó también Ahrenkilde, que dijo que «ya es hora de encender los grifos». Por su parte, el portavoz de la comisión de Energía, Ferrán Tarradellas, explicó que el último escollo que faltaba por solucionar era el de la composición de la misión de los observadores, y que tras decidirlo, la prioridad de Bruselas es que se reanuden los envios de gas «inmediatamente».

Además, preguntado sobre si la UE tiene intención de firmar un acuerdo escrito sobre este punto, tal y como reclama Moscú, Tarradellas recalcó que para la UE el acuerdo verbal es suficiente, y considera que firmarlo por escrito «no es necesario», aunque tampoco lo rechaza. En cualquier caso, precisó que antes de nada debe reanudarse el bombeo de gas.

«Las condiciones están acordadas, el despliegue se puede producir, y con el despliegue se puede reanudarel gas», recalcó Tarradellas.
Colegios clausurados, industrias que han echado el cierre, operaciones médicas canceladas y salas de maternidad calentadas con radiadores eléctricos son algunos de los efectos del corte de suministro del gas ruso, que ha dejado a cientos de miles de hogares de los Balcanes sin calefacción.

Por otra parte, las bajas temperaturas han provocado la muerte por hipotermia de 78 personas en Polonia desde noviembre, según datos del Ministerio de Interior, y las autoridades han vuelto a pedir a los ciudadanos que extremen las precauciones ante la actual ola de frío polar.