Merkel (i) y el primer ministro italiano Enrico Letta (d) pasan revista a la guardia de honor en la cancillería alemana en Berlín. | FABRIZIO BENSCH

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La canciller alemana, Angela Merkel, y el nuevo primer ministro italiano, Enrico Letta, coincidieron en señalar que se necesita un fortalecimiento de las instituciones europeas para superar la crisis del euro. «Si no hemos encontrado la salida a la crisis es porque no hemos tenido suficiente Europa», dijo Letta en una comparecencia ante la prensa durante su primera visita a la capital alemana, horas después de ser investido jefe de gobierno.

Merkel, por su parte, tras felicitar a Letta por su elección y expresar sus respetos hacia el presidente italiano Giorgio Napolitano por haber logrado sortear una difícil situación política, subrayó que, además de las reformas en cada uno de los países, es necesario mejorar las herramientas de la UE para combatir la crisis. «Por un lado cada uno de los países miembros de la UE tienen que hacer sus deberes y en ello Italia ha recorrido un trecho importante. Pero por otro lado, también tenemos que mejorar las herramientas de la UE», dijo Merkel.

Pacto fiscal

En este último apartado, según la canciller alemana, se han dado pasos importantes como el pacto fiscal y la creación del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE) y hay que seguir trabajando hacia la supervisión bancaria común y hacia una mayor coordinación de las políticas económicas. Merkel reiteró además su convicción de que los ajustes presupuestarios y el crecimiento económico no son objetivos opuestos, sino «complementarios» en la lucha contra la crisis que atraviesan países europeos.

En la rueda de prensa conjunta, la jefa del Gobierno alemán destacó que «la consolidación fiscal» y «el crecimiento» son fundamentales para mejorar la «competitividad» y fomentar la creación de empleo, una necesidad urgente para la canciller. «Europa tiene que salir de la crisis más fuerte de como entró en ella», aseguró Merkel.

Por su parte, Letta subrayó ante la canciller el compromiso de su gobierno, ratificado por el Parlamento y por el Senado, de «seguir con el saneamiento de las cuentas públicas» y enfatizó los avances logrados por Italia en este sentido en los últimos meses. A su juicio, si el continente europeo sigue en crisis después de cinco años es porque no ha habido «suficiente Europa».

El primer ministro italiano afirmó que el suyo es un Ejecutivo «claramente político» y con respaldo parlamentario que va a trabajar por recuperar la «confianza» en la política.