Fallece la reina Isabel II

La frustración de Carlos III con una pluma en Irlanda del Norte

Todo empieza a tambalearse cuando alguien le dice que ha escrito una fecha errónea

Antoni AgüeraBelfast13/09/22 20:00

Afrontar un reto de altura como es asumir el trono de Inglaterra pasados los 73 años no debe resultar sencillo. No obstante, algunos usuarios de las redes sociales han afeado el comportamiento y los modales del rey Carlos III en las últimas horas. Un vídeo publicado por CBS este martes por la tarde muestra al monarca británico visiblemente enojado porque una pluma estilográfica no funciona como él espera y necesita, con los ojos de la historia escrutándolo con atención.

«King Charles gets frustrated with pen at Ireland signing ceremony» (El rey Carlos se frustra con la pluma en la ceremonia de firma de Irlanda), titula el perfil oficial de la televisión norteamericana en Twitter, que abunda en la situación con el entrecomillado del heredero de Isabel II, quien junto a la reina Camila y algunos asistentes profirió «¡no puedo soportar esto!» ante su mal funcionamiento.

"I can't bear this bloody thing!": King Charles' signing ceremony at Northern Ireland's Hillsborough Castle made one thing clear – even royalty can't escape the frustration of an inadequate pen. pic.twitter.com/nzygNTLslX
— CBS News (@CBSNews) September 13, 2022

Según el citado medio anglosajón, «la ceremonia de firma del rey Carlos en el castillo de Hillsborough en Irlanda del Norte dejó una cosa clara: incluso la realeza no puede escapar de la frustración que provoca una pluma inadecuada».

En el documento adjunto a esta información se aprecia como, al principio, un miembro del servicio de la Casa Real británica puntualiza al monarca que este martes es día 13. El darse cuenta del error y el hecho de que la pluma suelte más tinta de la deseada o no escriba como a él le gustaría ha motivado el visible enfado del rey inglés, que ha sido apaciguado por su esposa, la reina consorte. No es la primera escena curiosa que captan las cámaras; pocas horas después de la muerte de Isabel II ya se comentó la forma con la que Carlos III se dirigía a sus asistentes para apartar un recipiente con tinta de un escritorio que no estaba según su parecer en el sitio indicado.