El presidente español, Pedro Sánchez, y el primer ministro belga, Alexander De Croo, en rueda de prensa durante su visita al paso de Rafah, en la frontera entre Egipto y la Franja de Gaza este viernes. | STR

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El Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) ha valorado positivamente la postura «clara y audaz» del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y del primer ministro belga, Alexander de Croo, respecto a la ofensiva militar de las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en la Franja de Gaza. La milicia palestina ha emitido un comunicado difundido en redes sociales en el que ensalza la condena de los líderes español y belga a la muerte de civiles palestinos a manos de las FDI, y además pone en valor el anuncio de Sánchez sobre la posibilidad de que Madrid reconozca la legitimidad del Estado palestino.

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«Valoramos la postura clara y audaz del primer ministro belga, Alexander De Croo, quien rechazó la destrucción de Gaza y la muerte de civiles, y del presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, quien condenó la muerte indiscriminada de civiles en la Franja de Gaza por parte del régimen ocupante y apuntó la posibilidad de que su país tomara la decisión unilateral de reconocer el Estado palestino si la Unión Europa no asume este paso», ha indicado el grupo. Asimismo, Hamás ha aprovechado para hacer un llamamiento a la comunidad internacional para que «se pongan del lado de la justicia de la causa palestina» y del derecho a la «autodeterminación» para establecer un «Estado independiente». En esta línea, ha exigido el fin de la «guerra genocida» iniciada por Israel. Igualmente pide que los líderes israelíes «rindan cuenta por sus crímenes contra niños y civiles indefensos».

Sánchez y De Croo han realizado una visita conjunta a Oriente Próximo que les ha llevado a reunirse con las principales autoridades de la región e incluía una parada en el lado egipcio del paso de Rafá, donde ambos realizaron una comparecencia de prensa en la que condenaron la situación. Ambos mandatarios mostraron su rotundo rechazo a la ofensiva de Hamás del 7 de octubre --en la que murieron cerca de 1.200 personas y otras 240 fueron tomadas como rehenes-- y recalcaron el derecho de Israel a defenderse, aunque denunciaron la muerte indiscriminada de civiles: más de 14.800 desde el inicio de la cruenta contraofensiva. Las declaraciones de Sánchez y De Croo no sentaron bien en Israel, que convoco a los respectivos embajadores de España y Bélgica para manifestar su desacuerdo. Además, la diplomacia israelí acusó al presidente Sánchez de «apoyar el terrorismo» de la milicia palestina.