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La legendaria Cristina Valls fue una institución de nuestra escena. Los hermanos Valls "Catina, Cristina y Joan" procedían de una antiquísima tradición teatral forjada en las barriadas palmesanas al amparo de asociaciones católicas y, con los años, trabajaron en todos los escenarios de la Isla. Cristina Valls "nacida en el primer año de un siglo que ya llega a su fin" empezó a trabajar muy joven en compañías de aficionados. En 1927, con su hermana Catina y su marido, Joan Estelrich, participó en la fundación de la compañía Catina-Estelrich. A partir de 1930 comenzó a escenificar obras en catalán de autores mallorquines de tanto renombre como Martí Mayol, Pere Capellà o Joan Mas. Cercana la guerra civil se alejó de la escena y reapareció en 1948 como primera actriz de la recién fundada compañía Artis y como «partenaire» de Francesc Forteza, abuelo de Xesc. En la Artis, y bajo el padrinazgo de los Valls, se formaron actores tan importantes como los hermanos Forteza. La primera dama de la escena mallorquina destacó en la caracterización de personajes populares. En el año 52 los miembros de la compañía Artis le rindieron un homenaje. En «Imágenes de Ayer» reproducimos aquel entrañable momento que Planas Montanyà atrapó para la eternidad. Cristina Valls abandonó definitivamente los escenarios quince años antes de que La Dama Blanca le llevara a su oscuro reino. En 1970 el Ayuntamiento de Palma le rindió un homenaje y un año después se le otorgó la medalla de plata de la ciudad.