Prometió que volvería a visitar la Isla

El quince de agosto de 1953 llegaron a Palma en un «douglas» de Iberia, procedentes de Madrid, los infantes D. Juan Carlos y D. Alfonso de Borbón y Borbón. Los hijos del infante D. Juan y Dª María de las Mercedes llegaron acompañados de su profesor D. José Garrido dispuestos a pasar una temporada en Valldemossa con los marqueses de Fontanar y sus hijos. En la mansión de éstos "antigua celda de los señores Bonsons" las autoridades locales les rindieron honores. Durante los diez días que pasaron de vacaciones en Mallorca, además de visitar los parajes más pintorescos de la Isla, asistieron a diversos actos artísticos, religiosos y populares. Cuentan que en el transcurso de los mismos, elegantes señoras «botifleurs» les besaban la mano entre grititos histéricos de devoción monárquica. La foto del archivo de Planas Montanyà está tomada en el Club Náutico de Palma, adonde acudieron acompañados del alcalde de Valldemossa, Sr. Cilimingras, y fueron recibidos por el capitán del barco de la marina griega que visitaron. En aquellos momentos, nuestro rey no imaginaba las horas que pasaría en aquel pantalán pasados los años. Cuando se disponían a abandonar Son Bonet con destino a Valencia, los infantes manifestaron que su estancia había sido muy grata y que se llevaban tan agradable recuerdo que «lo más probable es que algún día volvamos a visitar esta hermosa isla».